kancun12

Título: 🎃 Otra vez Halloween... 🎃 Nombre en el juego: Dkancun Nombre del foro: kancun12 Fecha: 1/11/22 Expansión: Shadowlands Que emoción sentía esa noche, nuevamente 31 de Octubre, podría jurar que había esperado más de 1 año desde la última vez, pero ya saben lo que dicen, los niños no tenemos muy buena percepción del tiempo, sea lo que signifique eso. -Ya llegó EADI- El grito de mi madre me sacó de mis pensamientos. Al parecer mi amiga estaba tan ansiosa como yo. -Bonitos tentáculos, pero ¿No vas a disfrazarte? - Bromee, ella rió. La ruta era clara, visitar el pueblo en busca de faroles encendidos y tumultos de lobos, brujas, zombies y todo aquello para lo que la imaginación diera pie, la olla de oro al final del arcoíris es sin discusión alguna el mercado de Enduin, el hombre más agradable que vive aquí, nadie nos trata como él, realmente nos quiere a todos. -No vuelvan muy tarde- Dijo mi madre sabiendo que ni siquiera la oímos al salir corriendo. Camino al pueblo nos extrañó la soledad y el silencio que nos rodeaba, no era normal siquiera en un día corriente, ¿Qué ocurría? Y ¿Por qué tenía esa sensación de dejavú? A medida que nos acercábamos a la plaza central, pudimos observar a las personas del pueblo, inmóviles, como si hubiesen echado raíces al suelo, ¿dormían? ¿jugaban? ¿Qué era ese aura brillante que desprendían sus cuerpos? - ¿Por qué nadie nos invitó a jugar? - Dijo Eadi, intentaba ocultar su miedo al ver el suelo teñido de color rojo. -A Enduin no creo que le haga gracia que usaran sus tomates para jugar - Se encontraba tan pálida a mi lado y yo no podía recordar si había llegado maquillada a mi casa o si era su color de piel. - ¿Qué hacen? - Silencio. Solamente silencio. Sin necesidad de hablar entre nosotros nos fuimos alejando del lugar, confundidos, asustados, incómodos, ¿Qué habíamos visto?, ¿Qué entendíamos de lo que habíamos visto?, nuevamente la extraña sensación de dejavú. Intentamos hablar de otras cosas, hicimos bromas pero no surtían efecto alguno, de igual modos ambos fingimos que sí y cambiamos la expresión de nuestros rostros. -Que emoción! Enduin va a tener demasiados dulces para nosotros- Mencionó Eadi. -Me leíste la mente - le dije. -Vamos rápido-. Enduin no estaba en su mercado, no había ningún letrero como solía dejar cuando iba a su casa y volvía, aún más extraño que eso era el estado en el que se encontraban los vegetales y frutas que vendía, Enduin era demasiado cuidadoso con sus cultivos, ponía mucho esfuerzo y amor en ellos, junto a su esposa y su hijo dedicaban su vida a sus tierras y a su pueblo. -Vamos a su casa, quizás el letrero se cayó a causa del viento, debe estar en su casa- Dijo Eadi y la seguí, me parecía razonable. Un niño no está preparado para presenciar lo que nosotros vimos en este momento, mejor dicho, no está preparado para entenderlo. - ¿POR QUÉ ESTÁN AHÍ ARRIBA? -Grito Eadi esperando que Enduin le respondiera. -¡¿ENDUIN?!- Silencio. Un simple tambaleo a causa del viento, nada más que eso recibimos de Enduin, su esposa y su hijo, los tres colgaban frente a su casa, se veía divertido. Sentimos un grito detrás nuestro - ¡EADI CORRE! - Silencio seco. Nos volteamos solo para encontrarnos con otra escena incompresible, nuestro maestro, el padre de Eadi, en el suelo, ¿Herido? ¿Muerto? ¿Durmiendo? No teníamos la respuesta a esas preguntas, lo que si sabíamos era que ese enorme y misterioso hombre era el culpable de todo. - ¡PAPÁ!- Oí el grito de Eadi y me desvanecí. Que dolor sentía en la cabeza, todo me daba vueltas y de nuevo ese sentimiento de dejavú, pese a que apretaba mi cabeza con todas mis fuerzas el dolor no desaparecía. Quién si había desaparecido era Eadi, ya no estaba a mi lado, yo me encontraba dentro de esta casa extrañamente familiar, comienzo a explorar las habitaciones completamente aterrado. Sangre. Dejavú otra vez. Miedo. Sangre. Dejavú otra vez. Miedo. Sangre EADI. Muerta. Otra vez. Que emoción sentía esa noche, nuevamente 31 de Octubre, podría jurar que había esperado más de 1 año desde la última vez...