Presenta tu personaje al mundo!

psicogamer · Julio 5, 2016

hace 51 minutos, tiriri dijo:

Nombre: Liryel Abbingdon

Profesión: Protectora del pueblo de Nightspire (Tipo Robin Hood) y exploradora/buscadora de reliquias.

Años: 19 (En escala humana)

Resumen de su historia: A los nueve años sobrevivió a un accidente de zepelin, en la cordillera más alta de Alterac, que llevó a la misteriosa desaparición de su madre Lady Areyla SolDorado. Después de sobevivir milagrosamente a una caminata de diez días hasta hasta Lunargenta (Su hogar) pasó el resto de su infancia bajo la tutela de su padre arqueólogo y explorador Therissen Abbingdon, que actualmente esta fallecido.

A la edad de 18 años,despues de la muerte de su padre, Liryel heredó sus posesiones y se convirtió en la condesa de Abbingdon. Desde entonces se le han reconocido numerosos descubrimientos arqueológicos en todo Lunargenta. Liryel ha alcanzado renombre tanto por ser una niña prodigio de la arqueología como por ser una afamada cazatesoros, y hay incontables rumores en torno a sus descubrimientos que invariablemente, la enfrentan a lo inexplicable, o directamente a lo increible.

Actualmente su paradero es desconocido, por lo tanto donde estan sus posesiones Abbingdon lo lleva su querido mayordomo. Hay ciertos rumores que dicen que durante una expedición se fue a una isla oscura... que naufragó allí. (Hay muchísimos rumores)

Ahora adjunto unas fotos de como sería ACTUALMENTE:

esto..... liryel, creo y digo creo, que de Alterac a el bosque cancion eterna hay un poco mas que una caminata de 10 dias,creo

Maplete · Julio 5, 2016

Nombre: Threkmar Alcarin

Edad: 25 (Escala humana)

Profesión: Cazador

Breve descripción física: De cabellos rúbios, 1'90 de estatura.

Historia del personaje: Mestizo entre elfo de sangre y humano, se crió en los bosques de Frondavil antes de la invasión demoníaca, resentido contra una noble llamada Anabelle debido a que esclavizó a su madre.

Spoiler

(Tu mente pasea por los oscuros túneles de una cueva adornada por unas extrañas y moradas columnas que van apareciendo periódicamente a tu paso, con una leve iluminación que proporcionan las antorchas que encuentras en tu camino. Tu mente llega a una gran biblioteca donde dos enormes escaleras en espiral se elevan en su centro. Notas una brisa que surca la parte trasera de tu cuello dándote un leve escalofrío y apagando las antorchas del salón, al mirar sobre tí notas que un libro, de considerable tamaño cae justo enfrente tuya. Al acercarte al manuscrito este se abre pasando velozmente sus páginas e iluminándose en un tono verdoso, al detenerse en una página, es como si tu conciencia entrara en un profundo sueño cuando comienzas a leer las extrañas letras de color verde brillante)

"El sol... hace tanto tiempo que no lo veo, han pasado años desde que estoy aquí encerrado... la única persona en quién confío es mi Eraniel, puede que sea una elfa de sangre y yo un humano pero en este lugar eso no importa... recuerdo cuando fuí capturado sin pertenencias como un mendigo y se me trajo como gladiador a esta arena en las cloacas de Dalaran, recuerdo cuando maté a mi primer contrictante, un orco, después un enano... mi primera derrota fué a manos de Eraniel, se negó a matarme y la castigaron una semana sin alimento."

(Las páginas del libro avanzan por su propia cuenta hasta volver a detenerse unas pocas mas adelante)

"Hoy me han transferido de celda, me han colocado de compañero con Eraniel, al parecer lleva aquí desde que nació, pobre... debe ser muy cruel no haber conocido siquiera a tus padres..."

(Las páginas vuelven a pasar pero esta vez un mayor tiempo)

"Llevo dos años ya luchando, aunque dudo que sea por mucho mas tiempo, Eraniel ha sido comprada como esclava por una familia noble, no se que harán cuando sepan que esta embarazada... solo espero que todo salga bien, por ella y por mi hijo..."

(Una fuerte y blanca luz es emitida desde el libro y te absorbe, dejandote sumido en un sueño)

"Un elfo de sangre corría por una frondosa selva, la espesa flora no dejaba caminar bien por eso se impulsaba de las grandes raíces de los árboles a su alrdedor para avanzar, al llegar a la orilla de un lago frenó en seco y se ocultó tras un arbusto localizado en el mismo borde. Sacó y preparó su rifle de caza, con unos segundos apuntó al oso que se encontraba cazando placidamente al otro lado y con un sonoro disparo, lo dejó tumbado, sin vida. Una silueta se colocó tras de el elfo y le puso una mano en el hombro."

-Buen tiro Threk, menuda puntería para darle justo en el craneo- Dijo el elfo con una sonrisa en la cara
-Gracias, aunque aun me falta práctica-
-¡Pero si disparas mejor que yo! Anda... llevémoslo al campamento-

"Un rato mas tarde, Threkmar y el otro elfo se encontraban sentados frente a una hoguera en lo que parecía ser un campamento nómada de diferentes razas donde uno cocinaba, otros desollaban las pieles, etc..."

-Aún recuerdo cuando te encontramos, un pequeño elfo tirado en medio de la selva a punto de ser devorado por los pumas- Dijo el elfo en un tono nostálgico.
-Bueno, me habeis criado y me habeis enseñado a cazar-
-¡Claro!, Quién no trabaja no come-
-¿Y como dces que se llama esta raza?- Dijo Threkmar señalando a unos humanoides peludos pero de baja estatura que estaban cocinando.
-Furbolgs, vivimos aquí con ellos, cazamos y nos llevamos bien-
-El bastión fauces de madera...-

"Una gran niebla cubre el lugar y es como si tu mente estuviese en otra situación, los bosques estan cubiertos de de una especie de fuego verde, distintos tipos de demonios asolan el lugar, el campamento anteriormente visto esta echo ruinas y la mayoría de quienes allí residían yacen muertos en el suelo, entre el incendio Threkmar se encuentra arrodillado intentando ayudar a levantarse al otro elfo..."

-Threk, debes irte antes de que te encuentren-
-¡No puedo dejarte aquí!-
-¡Que te vayas! Ni siquiera puede moverme, ya vienen... debes escapar Threk, tu no tienes porque morir aquí-
-Pero...- El otro elfo empuja a Threk haciéndole caer de espaldas y le tira un colgante tallado de madera
-No nos olvides chico, pero debes vivir, ahora... ¡Corre!-

"Therkmar recogió el colgante y con lágrimas en los ojos corrió lejos del campamento. Tiempo después, tras llegar a los baldíos durante un largo viaje, cayó desplomado del cansancio junto a un oasis donde logró beber agua y recoger algunos alimentos. Cuando bebía, una pequeña nota cayó del colgante, la cual había estado pegada en la parte posterior de este."

"Threkmar, soy tu madre, Eraniel, dejo esta nota contigo porque me han capturado, espero que las tribus de aquí te encuentren... he intentado escapar de esa noble, querían convertirte en un esclavo para siempre... no quiero ese futuro para tí, sé que en este bosque hay unas tribus nómadas que cazan por la zona, con suerte te encontrarán, mis piernas están heridas, no puedo escapar contigo... lo siento."

(Tras una cegadora luz, la escena vuelve a cambiar)

"Eraniel apoyada contra un árbol, encadenada a lo largo de este siendo azotada por una humana."

-Este es el castigo por intentar escapar, ¡Zorra!- Dijo la humana con una voz chillona
-¡Ah!- Gritaba de dolor Eraniel
-¿Te crees que por ser una elfa y tener esos cabellos rubios puedes llevarte la atención de mi marido?-
-¡Ah!, pero si no he echo nada.-
-¡Callate!- La humana dió latigazos mas fuertes. -Areyla ¡Ven!-

"Una elfa de cabellos morenos se acercó y recogió el látigo de la humana con la cabeza baja"

-Porcierto Aryela... me he enterado de la tragedia, dicen que tu marido esta muerto, una lastima... ¿Verdad?- La elfa mantuvo la cabeza agachada incluso cuando la humana le propinó una bofetada
-Eso es lo que se merece. Por quitarme el protagonismo, ¡Yo debería haber sido la famosa arqueologa de Lunargenta!- La humana se rió fuertemente -Por supuesto el mismo destino le espera a tu querida hija... Liryel se llamaba, ¿Verdad?-

"Vuelves a ver al cazador elfo Threkmar, zarpando en un barco rumbo a "Nightspire", sostiene una segundo nota en la que ponía ...bosque de Nightspire..."

Editado Julio 5, 2016 por Maplete

Maplete · Julio 6, 2016

Aquí dejo el resto de la historia de Lathorn, mi pícaro ya presentado anteriormente. Por desgracia ya no puedo editar el post así que escribo esto a los amantes de la lectura. Espero que lo disfrutéis.

Spoiler

Von Isendir de Rhein caminaba con un aire nervioso por sus aposentos. Los rayos del sol se colaban entre las anaranjadas cortinas del balcón iluminando la mayor parte de la habitación. Su primer hijo iba a nacer, Lady Alisa se encontraba dando a luz a su heredero... eran un momento muy esperado para toda la familia. Sus cuatro hermanos se encontraban reunidos en el gran salón de la mansión, todos aguardando en silencio...

   -¡Es una niña!
   El sonido de los vítores del doctor y sus asistentes, acompañados por los sirvientes de la casa resonaron por el lugar.
   -Mi señor... es una niña -Dijo uno de los criados que habían entrado en los aposentos de Isendir para anunciar el nacimiento-.
   -¡Mostrármela!

Con pasos firmes y algo bruscos, Isendir caminaba al frente de un gran grupo de sirvientes en dirección al lugar del parto. La luz era cegadora, al abrir las puertas de la habitación los rayos de sol se alzaron desde los grandes y abiertos ventanales iluminando de frente al noble que miraba fijamente a su mujer sosteniendo el bebe. Sin quedarse mas de dos segundos quietos corrió a abrazar a su esposa besándole la frente mientras cogía en brazos a la pequeña.

   -Es una niña preciosa...
   -Ha salido a su padre -Dijo Lady Alisa con una sonrisa en la cara-.
   -Debo informar a mis hermanos.

Los cuatro hermanos miraban expectantes las noticias del líder de la familia, todos en silencio y con unos rostros serios se encontraban sentados en una mesa rectangular donde Isendir tomaba el asiento del fondo. Frente a cada uno, había depositada una daga plateada con una empuñadura terminada en la cabeza de un león. Isendir, tras una breve pausa, rompió el silencio.

   -La próxima heredera de la casa es... Ephryne, mi hija.
   El primero de los hermanos, sentado a la derecha del señor fué el primero en contestar.
   -¿La próxima heredera es una mujer?
   Esta frase dejó un breve silencio entro los cinco los cuales miraban a Isendir, apoyado en la mesa con sus codos y ambas manos entrecruzadas a la altura de su boca.
   -Así es. La próxima heredera es una mujer, es la tradición.

Todos los hermanos se miraron unos a otros y tras una corta pausa, se levantaron al unísino, con la daga de plata en mano dijeron...

-Por la sangre y el honor de los Rhein, juramos y ofrecemos nuestra vida, con orgullo y la cabeza alta, a la heredera y futura señora de los Rhein. Nosotros, los hermanos sin nombre, que protegemos a los nuestros desde las sombras, juramos por la sangre que corre por nuestras venas, total respeto, lealtad y consejo a Lady Ephryne de Rhein.
Tras decir esto, los cuatro hermanos, con la daga de su mano se hicieron un corte en la palma izquierda dejando fluir su sangre desde esta.

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Lady Alisa se encontraba tumbada en su dormitorio. Su hija, Ephryne, la observaba con ojos llorosos mientras le agarraba la mano con fuerza.

   -Mama... he tenido otra pesadilla...
   -Cuéntame, mi pequeña. -Dijo Alisa con un tono maternal que desprendía calidez y tranquilidad.
   -He vuelto a soñar que tu enfermedad empeoraría y te perdería... -Dijo Ephryne con lágrimas en los ojos
   Lady Alisa observó, con algo de tristeza en su mirada a su hija.
   -Tranquila Ephryne, mamá siempre estará aquí, te lo prometo.
   -¿De-de verdad?
   -Por supuesto pequeña mía, tu eres lo mas preciado para mí en este mundo...

Lady Alisa, con una piel bastante pálida, abrazó a Ephryne colocando su cabeza junto a la de su hija. El rostro de Alisa se encontraba sereno, con una sonrisa sincera aún cuando las lágrimas comenzaron a fluir por su rostro...

-Duérmete hija mía, mañana será otro día.

Ephryne se acurrucó junto a su madre, aun con el rostro empapado en lágrimas y se durmió al poco tiempo. Lady Alisa, tras comprobar que su hija se había dormido la abrazó, con los ojos cerrados y manteniendo la expresión de serenidad, dijo en voz baja...

-Ephryne... no sé si seguiré aquí cuando despiertes... te quiero. Eres mi primera hija, eres lo único que tengo que de verdad quiera en este mundo... sé que vas a pasar por cosas difíciles, pero sé fuerte. Recuerdo el día de tu nacimiento, tu padre y yo estabamos tan felices... nuestra pequeña... me dejó elegir tu nombre. Ese nombre, es el que tuvo mi hermana... me reuniré con ella pronto, pero... recuerda hija mía. Siempre estaré a tu lado.

El silencio se hizo completamente con el ambiente, Lady Alisa se encontraba ya sumida en un profundo sueño del cual probablemente no despertaría... y Ephryne se encontraba cerrando los ojos con fuerza sin lograr contener las lágrimas que mojaban la almohada mientras intentaba no hacer ruido...

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Lady Ephryne, ya toda una muchacha, rondaría los dieciseis años mas o menos, con largos cabellos dorados y unos ojos azules brillantes que resaltaban en su clara piel, caminaba por los frondosos jardínes de la casa Rhein. Los rosales alcanzaban la altura de tres metros y los arboles ofrecían agradables lugares de sombra para soportar el calor del verano. Junto a la niña, un hombre mayor caminaba con esta apoyado sobre un bastón de marfil.

   -Papa... -Dijo la pequeña con un tono de curiosidad- ¿A dónde vamos?
   -Has cumplido diez años hija mía... eres toda una mujer, voy a darte un regalo.
   -¡Oh!, ¿Y que es papa?
   -Ya lo verás cuando lleguemos...

Padre e hija caminaron hasta llegar a un mausoleo, la gran puerta de mármol que lo cerraba comenzó a abrirse lentamente a medida cuando Isendir introdujo su bastón en un orificio a la izquierda de esta. Una densa neblina salía del otro lado, con pocas antorchas dejando la iluminación justa para no tropezarse por los numerosos escalones que conducían a una cámara inferior.

   -Pa-Papa... tengo miedo -Dijo la pequeña con una voz temblorosa.
   -Tranquila Ephryne... papa esta contigo.
   Isendir cogió de la mano a su hija y comenzó a descender a medida que la puerta se cerraba a sus espaldas.

En la parte inferior del mausoleo se abría ante ellos una enorme cámara iluminada por numerosas antorchas colocadas en las oscuras columnas de las paredes. Isendir condujo a su hija al centro de la cámara donde se encontraba una especie de altar rectangular.

-Espera aquí Ephryne.
-Pe-pero ¡Este lugar da miedo! -Dijo la joven con un tono entrecortado

Isendir soltó su mano y marchó al otro lado de la sala fundiéndose entre las sombras. Al poco tiempo un niño, con una apariencia de la misma edad que Ephryne surgió de donde su padre había desaparecido.

   -¿Qui-Quién eres?... -Dijo Ephryne mirando fijamente al chico con ojos llorosos.
   -Tu primer hermano, tu mano derecha. -Dijo el muchacho de cabellos oscuros.
   -¿He-hermano...?
   -¡Tómala! -Resonó la voz de Isendir en la sala.
   -¿Pa-papa?
   -Ephryne... hoy aprenderás una valiosa lección sobre la familia Rhein, hoy, en tu decimosexto cumpleaños se te arrebatará tu debilidad.

Tras una breve pausa el chico tomó a la joven Ephryne y la tumbó sobre el altar a pesar del de esta, desgarró su vestido y le arrebató su pureza en aquel frío y oscuro sitio.

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Lady Ephryne, ya de una edad adulta, aparentaría unos veinte años en edad humana pero cerca de cincuenta en élfica. Se encontraba mirando el parto de su séptimo hermano, otra alma sin derechos por haber nacido en la familia Rhein. Acompañada de sus otros seis hermanos a sus espaldas, todos en una posición firma y vestidos con ropajes oscuros. Ephryne miraba con desprecio, aunque con algo de pena al bebé. Tras el parto, se acercó a mirarlo mas de cerca a lo cual obtuvo la ingenua mirada del recién nacido acompañada de una ingenua sonrisa, la cual repugnó a Ephryne. Con una media vuelta salió de la habitación cerrando la puerta tras de sí.

   -Otra herramienta mas... -Dijo el hermano que iba a la derecha de Ephryne
   -Supongo...
   -¿Sucede algo Lady Ephryne?
   -No, nada... es solo que ese niño tenía una mirada extraña...
   Su hermano la miro con algo de curiosidad aunque hizo caso omiso.

La mano derecha de Ephryne, con el cual ella había compartido numerosos secretos y su familiar de mayor confianza mediría 1'95, de una complexión en la que se denotaba gran esfuerzo físico.

   -¡Padre! ¿Cuantos hijos mas piensas tener? -Exclamó Ephryne al llegar al gran salón donde se hallaba su padre sentado en silencio.
   Con una mirada de superioridad, Isendir miró en silencio a su hija.
   -¿Acaso no piensas contestarme? -Insistió
   -¿Quieres que te recuerde que todavía no has heredado el cargo de los Rhein?
   -Lo sé, pero eso no significa que vaya a quedarme callada cada vez que quieras traer otra pobre alma al mundo en el seno de esta familia.
   Isendir se acercó a Ephryne y le propinó una bofetada que hizo tambalearse a Ephryne
   -Deberías tener mas respeto, así funcionan las cosas. Has nacido en esta familia, ¡Compórtate como debes!
   Con la palma de su mano tapandose la mejilla del golpe, en silencio dió media vuelta y se marchó a sus aposentos.

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Lathorn, el séptimo hijo ya había cumplido los diez años de edad. Se encontraba caminando junto a su maestro en dirección al gran salón de la mansión con firmeza y vestido de una túnica negra algo ajustada.

   -Asi que hoy es el día que me arrebatan mi libertad... -Dijo el joven Lathorn.
   -Tu nunca has tenido de eso. -Le espetó Elar, su maestro.
   -Pues algo tendré, si soy el único que ha tenido un maestro particular...
   Elar golpeó en el vientre de Lathorn con la empuñadura de su espada.
   -Sí, por desgracia se me da mal incultar modales. -Ambos soltaron una leve risilla.
   -Bueno... aquí es Lathorn, entra y recuerda el juramento.

Las grandes puertas del salón se abrieron a la par, en su centro se encontraba Ephryne, observando fijamente al joven que ofrecería su vida como era costumbre a su hermana. Al fondo, se encontraba Isendir, sentado con una copa de vino entre sus manos. Lathorn avanzó hasta posicionarse frente a su hermana, pasando la mirada por sus "hermanos" posicionados en orden tras de esta. Lathorn se arrodilló y tras mirar de reojo a su maestro, que se encontraba junto a la puerta varios metros detrás suya, comenzó a hablar.

   -Yo, Lathorn, por la sangre y el honor de los Rhein, juro y ofrezco mi vida, con orgullo y la cabeza alta, a... -Dejó la frase colgada en el aire
   -¿Qué sucede chico? -Dijo Ephryne con un tono amenazante.
   -¿Porqué hay que hacer esto?
   Ephryne, como el resto de los miembros de la sala miraron soprendidos al muchacho, aunque con una mirada fría.
   -Es la tradición. -Dijo Ephryne
   -Es ridícula...
   La mano de Elar golpeó la cabeza de Lathorn contra el suelo a gran velocidad y lo mantuvo inmovilizado sosteniendo sus brazos con su otra mano.
   -Hmm, eres un chico impertinente. No debí haberte recomendado un profesor particular.
   -Prefiero ser así a...
   Elar elevó su cabeza y la chocó de nuevo con mas fuerza provocándole sangre al joven.
   -No tolero a la gente irrespetuosa.
   Ephryne desenvainó una espada de uno de sus guardias y la colocó junto al cuello de Lathorn
   -Lady Ephryne... -Interrumpió Elar- Es un chico impertinente, pero es hábil, perdónele...
   Ephryne interrumpió a Elar haciendole un corte en la mejilla.
   -¿Tu también maese Elar? Tenía una mejor visión de tí.
   -Lo siento, déjeme hacerme cargo del chico -Dijo cabizbajo.
   -De todas formas no me sirve, quédatelo. Pero ya no recibirá cuidados por parte de los Rhein, deberás cuidarlo bajo tu sueldo y responsabilidad.
   -Si, mi señora.

Ephryne devolvió la espada a uno de sus "hermanos" tras de ella y miró a Elar desafiante mientras que se llevaba al joven Lathorn a rastras del salón. Una vez fuera del salón, en el jardín de la mansión, Elar propinó una paliza a Lathorn hasta dejarlo sin poder levantarse, pero aún consciente.

   -¿¡Te das cuenta de lo que has echo muchacho?!
   -Y-yo he echo l-lo que me has en-enseñado... -Dijo Lathorn con la mirada perdida en el suelo.
   -¡Yo no te he enseñado a insultar así a la persona que te ha cuidado!
   -E-ella... n-no me ha... cuidado.
   -Ella te asignó como mi pupilo, ella ha mantenido tu comida y tu seguridad. Deberías estarle agradecido porque no fueses entrenado como el resto de tus hermanos.

Lathorn perdió el conocimiento mientras Elar le regañaba, tras este calmarse recogió al muchacho y se lo llevó a su cabaña junto a la mansión.

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Años mas tarde, en una de las misiones para la familia Rhein. Elar cabalgaba junto a Lathorn por una llanura persiguiendo a un humano que intentaba escapar de ellos. Al entrar en un bosque, fueron emboscados por un grupo de doce jinetes que socorrieron al humano. Saltaron desde una elevación del terreno desde la cual, por sorpresa lograron asustar a los caballos de Elar y Lathorn, dejándolos espalda con espalda rodeados por los jinetes, que andaban en cirulos con las armas desenvainadas.

   -¿Cómo es que siempre acabamos igual, muchacho?
   -¿Acaso he tenido la culpa esta vez?
   -No se como... pero siempre resultas tenerla.

Los jinetes arremetieron contra ellos. Lathorn, desenvainando su espada curva dando una voltereta degolló a uno de los jinetes que se dirigían hacia el, seguidamente, rodó por el suelo haciendo un corte en las riendas del segundo jinete desestabilizandolo y tirandolo de la montura. Elar había desenvainado sus dos dagas curvas, aunque de considerable tamaño no llegaban a ser espadas. Las lanzó contra dos jinetes que venían directos hacia él derribándolos a la vez que neutralizandolos, corriendo de frente y extrayendo las daga de los cuerpos que acababa de tirar diró un giro con sus armas extendidas derribando a otros dos de los jinetes. El resto, al ver la escena comenzaron a retirarse.

   -Te estas haciendo viejo Elar, igual deberías retirarte. -Dijo Lathorn
   -¿Pero que dices? si solo has derribado dos muchacho, aún te queda mucho para superarme.
   Ambos rieron y volvieron a montar sus caballos.
   -Volvamos a la mansión, ya sabemos quién es el culpable del robo, podemos prepararnos mejor otro día.
   -Como mandes.

Al salir del bosque a galope de nuevo por la colina vieron como les esperaba una patrulla de veinte hombres con sus armas desenvaindas. Al ver esto volvieron a entrar al bosque velozmente y se separaron con la intención de perderlos entre los árboles. Elar tomó un camino por la izquierda mientras que Lathorn tomó el de la derecha, consiguió algo de ventana a sus perseguidores y en pleno galope, saltó de su caballo dejando a este irse y escondiéndose en la copa de uno de los árboles. La patrulla pasó bajo el y continuó por el camino siguiendo las huellas del caballo. Lathorn bajó y corrió en dirección izquierda para buscar a su maestro. Una hora mas tarde, tras seguir el camino izquierdo, Lathorn vió a los jinetes sin vida por el suelo, continuó por el camino cada vez mas preocupado hasta ver a su maestro tirado en el suelo junto a un árbol.

   -¡Elar! -Exclamó Lathorn corriendo en su dirección
   -¡Búh! -Le asustó Elar saltando de repente.
   -¿Era broma?
   -¿De verdad crees que unos cuantos jinetes pueden conmigo?
   Lathorn suspiró llevandose la mano al pecho
   -No me des esos sustos.
   -Mírate, pareces tu el viejo.
   Ambos comenzaron a reír hasta que una flecha atravesó el pecho de Elar.

Lathorn al mirar detrás suya, vió como uno de los moribundos guardias había logrado desenfundar su ballesta y gastar su último aliento en un disparo.

   -¡Elar!
   Lathorn sostuvo el cuerpo de su maestro antes de este chocarse en el suelo.
   -Vaya... a esto lo llamo yo una karma...
   -¡No! ¡Maestro!
   -Relájate Lathorn, en nuestro oficio esto es normal...
   -Pero...
   Elar extendió sus dagas hacia Lathorn
   -Tómalas... ahora mismo ya me son inútiles.
   -Sobrevivirás...
   -No... lo sabes perfectamente. Vé a la casa y toma esta nota... -Elar sacó una nota de su bolsillo trasero. -Entrégasela a Ephryne.
   Las manos cada vez mas frías de su maestro se resbalaron de las de su joven aprendiz, que aún sostenia su cadáver.

La mirada de Elar se encontraba perdida en el cielo, ya no respiraba y tenía su pecho cubierto de sangre. Lathorn, tras taparle sus ojos, dejó el cadáver apoyado en un árbol, montó uno de los caballos que habían dejado los jinetes y partió rumbo a la mansión de Rhein con una mirada fría.

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(Tras la historia del personaje en el Foro y antes de Nightspire)

Las frías calles de Lunargenta... ya no había a quién asesinar, a quién perder o a quién servir. Mientras se encontraba sentado a la sombra de un un edificio vió como una joven muchacha, de almenos 20 años se paró frente suya.

   -¿Quieres algo de comida? -Preguntó la elfa con un tono inocente.
   -Guárdate la... tampoco es que yo la pueda aprovechar.
   -¡No seas así! anda, toma.
   La elfa ofreció una barra de pan y una jarra de leche a Lathorn.
   -¿Me vas a dar todo eso?
   -Jajaja, tranquilo, trabajo en la taberna de atrás tuya, en mi familia siempre ayudamos a los necesitados aunque no tengamos mucho.
   -¿En que os beneficia? -Preguntó perplejo el elfo.
   -¿Beneficia? -Dijo con una sonrisa la elfa mientras entró en la taberna.

Varios días después, Lathorn seguía recibiendo la hospitalidad de la elfa hasta que se ofreció a trabajar gratis, solo a cambio de alimento como recadero de la muchacha. No tardó mucho en comenzar a verla de otra forma, era una sensación extraña, cálida, parecida como a la que sentía con su maestro pero a la vez tan distinta... sentía ganas de protegerla, estar siempre con ella, verla sonreír, ayudarla cada vez que lloraba... sentía rabia cuando la molestaban o incluso odio a quienes hablaban mal de ella...

   -Oye Lathorn, ¿En que piensas? -Pregunto la elfa que lo miraba fijamente.
   -Oh... en nada, solo miraba el cielo...
   -Es bonito... ¿Verdad?, las estrellas...
   -Supongo.
   -¿Supones?, -La elfa soltó una risilla.
   -Bueno... sí, supongo...
   -Por cierto... mañana partiré una semana al sur, tengo que entregar unos pedidos a unos viejos familiares, ¿Cuidarías la tarberna por mí?
   -¿No puedo acompañarte? -Preguntó Lathorn mirandola con preocupación
   -Mi padre esta enfermo y no tengo a nadie a quien pedirselo. Anda... porfavor. -Dijo la elfa mientras lo agarraba del brazo mientras reía
   -De acuerdo, pero ten cuidado...
   -¿Te preocupas por mí?, me siento halagada.
   Lathorn se quedó observandola por un breve tiempo a los ojos mientras ella comenzó a sonrojarse.
   -Y bien... ¿Vas a besarme o a esperar a que te diga que lo hagas?
   -¿Cómo?
   -Vaya... que cortito eres.
   La elfa acercó su rostro lentamente hasta el del elfo hasta acabar juntando sus labios.

Tras un largo beso el cual dejó a Lathorn sin palabras.

   -¿Sientes algo por mí Lathorn?
   Lathorn se quedó observando a Vywien, la elfa, durante un momento en silencio.
   -Sí.
   -En ese caso, tómate lo mas enserio y espérame a cuando vuelva, tengo una sorpresa para tí. Buenas noches.

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Al cabo de una semana Lathorn recibió un correo entregado por el padre de Vywien. Al abrirlo los puños del elfo arrugaron la hoja, las lagrimas comenzaron a descender por sus
mejillas...

"Lathorn, ya he llegado a casa de mi madre, te manda saludos para cuando vuelva. No puedo dormir por alguna razón asi que he pensado en escribir esta nota. Me cuesta decirlo con palabras, supongo que también te pasa. Nos conocemos desde hace un mes, pero ha sido un mes maravilloso, no se nada de tí, de tu pasado... pero me encantaría conocerte mejor. Me has tratado de una forma fantástica, ¿Crees que no sé como me miras? Yo también estoy enamorada de ti Lathorn... cuando vuelva, espero poder decírtelo a la cara y no tener que recurrir a la nota, pero justo ahora no se me ocurre que otra cosa hacer para conciliar el sueño... ¿Recuerdas cuando se me cayeron las cajas de la compra frente a la taberna y tu me ayudaste a recogerlas?, ¿Cuando nuestras manos se rozaron? o... ¿Aquella vez que te manchaste la boca al comer y te limpié con una servilleta? ¡¿De verdad no lo pillabas?! Bueno... estoy deseando volver, quiero que seamos sinceros, voy a decirte lo que siento por tí y espero que me respondas igual. Voy a terminar de escribir aquí, no me queda mucha mas tinta... supongo que pensaré en tí mientras concilio el sueño. Te quiero."

Tras quemar la nota en la chimenea y quedarse con la cabeza agachada durante un tiempo frente al calor del hogar, recogió sus pertenencias y cogió una montura. Galopó al sur durante dos días sin parar hasta dar con la aldea de la madre de Vywien. Caminó callejón por callejón hasta encontrar el mas mínimo rastro de ella, hasta dar con un pendiente que esta llevó el día antes de su partida tirado frente a una de las entradas a las alcantarillas. Con dagas en mano descendió por el oscuro lugar pasando de los mendigos y las prostitutas que allí se refugiaban de la lluvia... al avanzar más, encontró a una panda de hombres que le rodearon empuñando espadas algo melladas, probablemente robadas.

   -Dejadme pasar. -Dijo Lathorn con un tono seco.
   -¿Y si no lo hacemos? -Contestó el cabecilla de la banda
   -Os mato.
   Todos los atracadores comenzaron a reir mirandose los unos a los otros.
   -No deberías subestimarnos chico.
   -¿Porque?
   El cabecilla mira al elfo algo confuso
   -Obviamente somos mayores en número.
   -¿Y que? solo me seríais de utilidad si conocieseis algo sobre una elfa que fué atracada hace poco por esta zona.
   -¿Conocida tuya?
   -Si.
   Los rateros volvieron a reir mirandose entre sí
   -Suplicó por su vida como una zorra. -Dijo uno de ellos a espaldas de Lathorn.

Antes de que los demás dijesen nada una daga le rajó el cuello haciendo que callese de rodillas mientras se desangraba y dejaba los ojos en blanco. El resto de los rateros cargaron en dirección al elfo con torpeza. Lathorn, de una patada, desarmó al cabecilla que iba primero e incrustó su daga en su vientre, retorciendola provocando el gimoteo de dolor del ratero. El resto de ellos tiraron sus armas y se dieron a la fuga. Ninguno escapó.

Tras volver a la posada, dejó un saco de oro al padre, al igual que hizo con la madre que le había quitado a los ladrones. Una vez partió de allí, en un intento de no volver a hacer daño a nadie mas, se quitó la vista y marchó a un nuevo lugar conocido como Nightspire.

Editado Julio 6, 2016 por Maplete

Mannoloroth · Julio 6, 2016

Nombre: Grauggar Sangremartillo (Graug)

Edad: 26 (Joven)

Profesión: Herrero del clan Roca Negra al servicio también como soldado en la Horda. También intenta ayudar a los herreros inexpertos en Nightspire.

Breve descripción física: Pelo castaño, ojos amarillos, porta un martillo poco refinado a la batalla, también lo usa al forjar armas y armaduras al parecer.

Historia del personaje: Graug Sangremartillo era hijo de los miembros del clan Roca Negra que continuaron sirviendo a la Horda, como Eitrigg, Colmillosauro... etc. Realizó todos los ritos orcos de entrada a la madurez sin problema, pero sin destacar, como la mayoría de los Roca Negra, adoraba la herrería y la minería, fue destinado a Sierra Espolón donde mientras todos los brutos fueron a explorar el bosque cercano, dejando apenas 5 herreros trabajando en las armas y armaduras, la Alianza se infiltro en el campamento, asesinando a 4. Los brutos los vieron a lo lejos, eran sobre 13, un archimago, un mariscal, once soldados. Volvieron al campamento para encontrárselo vacío, y en la quinta herrería se encontraron una masacre, todo era sangre, absolutamente todo estaba lleno con sangre, y ahí de pie... Había un orco sin un arañazo, con delantal de herrero y un martillo, desde entonces a este orco se le ha dado el sobrenombre de Sangremartillo, y actualmente ayuda a la Horda allá donde se proponga.

Oskrun · Julio 7, 2016

Nombre: Carmillia Lorendill

Edad: 35 años aproximadamente (muy joven)

Profesión: Maga al servicio del Kirin Tor

Breve descripción física: Una elfa delgada y no demasiado bella para los estándares de su raza, pero no por ello poco atractiva. Lleva el pelo rubio y, frecuentemente, deshecho o recogido de forma sencilla. Ojos muy inquietos, incapaces de permanecer mucho tiempo mirándote fijamente. Acostumbra a vestir de azul y a llevar una pequeña varita de cristal brillante ceñida al cinturón. Tiene leves marcas de ojeras en el rostro, fruto de pasar bastantes noches en vela. No suele ir excesivamente maquillada ni llevar joyas de ninguna clase.

Breve historia del personaje: enlace a la historia completa aquí.

Editado Julio 7, 2016 por Oskrun

Maplete · Julio 9, 2016

Nombre: Hijikata Alcarin

Edad: 1056 años.

Profesión: Alquimista, investigador, herborista, bibliotecario, escritor.

Breve descripción física: Hijikata posee un cabello largo y rubio propio de su raza y las familias nobles, suelo y caído sobre sus hombres. Unos ojos tranquilos aunque aveces llenos de vida cuando descubre algo nuevo. Complexión delgada y con los hombros algo caídos. Suele llevar una túnica de color verdoso con numerosos adornos.

Breve historia del personaje: Hijikata Alcarin nació en una prestigiosa familia dedicada a la magia en Lunargenta, dedicó su vida desde que tiene memoria a leer. En su juventud padecía gran número de enfermedades y no le gustaba salir de casa, así que la adquisición de conocimiento se volvió su estimulante. Dominó las artes mágicas desde pequeño y superó a todos sus profesores particulares. Al lograr recuperarse de la mayoría de estas enfermedades se dedicó a viajar y a recolectar información siempre con una libreta en mano. Apuntaba cada detalle del lugar por donde pasaba. No le interesó mucho el socializar con los demás pues no le parecía interesante una conversación mundana donde no había nada que aprender.

Su obsesión por el conocimiento le llevó a practicar artes basadas en la brujería y a relacionarse con criaturas ajenas a este mundo lo cual le llevó a alejarse de su familia y pasar los días encerrado en su habitación inspeccionando reliquias y libros que compraba o encontraba en los lugares por los que había viajado. Antes de darse cuenta se encontró solo en su mansión, su familia ya no estaba y tomó el mando de la casa. Contrató numerosos criados y sirvientas para la conservación de esta cada vez que volvía de sus viajes. En uno de ellos conoció a un diablillo llamado Ratzag el cual le habló de su viejo amo y de una extraña fuente de energía en una isla recientemente tomada por el control de la horda. Esto despertó la curiosidad de Hijikata el cual decidió partir a ese misterioso lugar llamado Nightspire.

Aquí dejaré un fragmento de cuando conocío a Ratzag.

Spoiler

La torre de los susurros... almenos así la llamaban las lenguas populares del luger, un nombre encantador... cuanto menos. Un elfo de sangre que portaba unas extravagantes túnicas de color verdoso se encontraba de pie observando la torre con una libreta en su mano derecha. El paisaje era algo oscuro, no hacía viento ni tampoco se escuchaba ningun otro sonido. Junto al elfo, un renegado bastante peor vestido en comparación, parecía algo nervioso.

   -Esta es la torre de la que os hable maese Alcarin. -Dijo el renegado con un tono de voz algo ronca
   -Sí, es una bonita torre... y dime, ¿Por qué la llaman la Torre de los susurros? -Contestó el elfo.
El renegado se quedó observando la torre por unos segundos sin decir una palabra como si algo acaparase toda su atención.
   -Los que entran no salen de nuevo... Se dice que los viajeros solitarios que pasan por esta zona escuchan voces... los que no desaparecen, claro.
   -Interesante cuanto menos, esto... -El elfo dejó la frase esperando que el renegado la completase
   -Bemalaeth.
   -Eso, Bemalaeth. Has sido de gran ayuda, aquí tienes tu oro. -Dijo el elfo con la mirada en la torre mientras le daba una bolsita de oro.

Cuando el renegado se marchó, el elfo se encaminó en dirección a la entrada del enorme torreón. Al acercarse a la puerta y darse una vuelta para mirar a sus espaldas, el renegado ya se había marchado y una suave brisa recorrió los cabellos del noble. Al tocar la gran puerta de madera, esta se abrió lentamente haciendo resonar en su interior el chirriante sonido de las bisagras. Sin siquiera pensarlo, se encaminó en dirección a las escaleras recogiendo a su paso una antorcha que colgaba de la pared, puso una mano encima de esta y al quitarla predió en esta una llama. A medida que subía notaba como un aire mas frío, como si la cima de esa torre fuese un lugar ajeno al mundo exterior. Llegó a una habitación que se encontraba a medio camino de la cima del torreón, una habitación con bastantes estanterías polvorientas y algunas cajas tiradas por el suelo. El elfo avanzó hasta el centro de esta habitación, sacó su libreta y comenzó a escribir en esta con una pluma que extrajo de su bolsillo.

   -¿Podrías hacerme el favor de no esconderte detrás mía? -Dijo sin apartar la vista del papel
Detrás del elfo varios libros cayeron de la estantería dejando ver a un pequeño diablillo con una sonrisa en su puntiaguda cara.
   -Ratzag, Ratzag ¡Ese soy yo! -Dijo el diablillo entre risillas con una voz chillona
   -No recuerdo haber preguntado tu nombre, pero de acuerdo. -Contestó el elfo continuando su escritura
   -¿Y tu? Di tu nombre... ¡Si! ¡Tu nombre!
   -Hijikata Alcarin, de Lunargenta. -Contestó con un tono de voz totalmente desinteresado
   -¡Hijikata! ¡Pagar debes para pasar por mi torre! -Chilló el diablillo volviendo a reirse.
Cerrando de golpe la libreta giró su mirada en dirección al diablillo.
   -No me interesa pagarte si no tienes nada que ofrecerme.
   -¡Guía! A la cima... ¡Puedo enseñarte mi torre!
   -Me lo pensaré.

Hijikata comenzó a subir las escaleras espirales que se encontraban pegadas a la pared en dirección a la cima del torreón. El diablillo lo seguía dando pequeños pero rápidos saltitos por la barandilla de la escalera.

   -¿Que será lo que me dará? ¿Que será? -Decía el diablillo con su tono ya algo repetitivo
   -A no ser que encuentre algo interesante, nada.
   -¡No hay trato! ¡Sin trato no hay camino! -Exclamó
La escalera frente a ellos se desvaneció
   -¿Qué quieres a cambio? -Dijo Hijikata con un tono de voz neutro mirando con curiosidad el tramo que se había desvanecido
   -¡Dinero! ¡Dinero!
Sin siquiera girarse extrajo una moneda de oro de su manga y se la lanzó al diablillo el cual la atrapó al vuelo
   -¡Si! ¡Brillante! Valdra por ahora... -Contestó con un tono satisfecho.

El tramo de las escaleras reapareció delante suya como si siempre hubiese estado ahí.

-Curioso. -Dijo Hiji

Al llegar a la cima se encontraron una habitación vacía, repleta de símbolos y runas dibujadas en las paredes. En su centro había una especie de grabado en suelo con algunas pilas de libros desperdigados a su alrededor. Parecía el lugar de rituales mediante el cual se hispedaba a un demonio en el cuerpo de un ser vivo para poder comunicarse con este, Hijikata se acercó al círculo y comenzó a ojear los libros mientras el diablillo se reía de fondo. Una fugaz luz de color verde salió disparada desde las escaleras en dirección a Hijikata, la cual se desvaneció en la palma de su mano derecha, que había interceptado el proyectil.

   -Que bajo nivel. -Murmuró el brujo
   -¡¿Quien se atreve a entrar a mi torre?! -Gritó una silueta de un hombre que acababa de subir por las escaleras
Hijikata permaneció en silencio, con una pose de completa tranquilidad observando al humano.
   -¡No volveré a preguntar una segunda vez!

El humano comenzó a murmurar para si mismo en otra lengua comenzando a desprender en sus brazos un tono de color morado. Al finalizar una sombra surgió del suelo enfrente de este y adoptó la forma de un manáfago el cual cargó al instante en dirección al elfo. Con una mirada impasible y sin emoción pero con una sonrisa de superioridad en su rostro el elfo levantó la mano en dirección al demonio y tras decir una palabra este frenó en seco volviéndose contra su amo.

-¡¿Que?!, ¡¿Cómo?! -Dijo el humano

Antes de que se diese cuenta en elfo se encontraba cara a cara con el jóven. Con su mano alzada sobre su rostro comenzó a extraer la energía vital del humano que tornó su expresión a un tono agonizante pero, para sorpresa del elfo anuló el proceso y sus ojos se volvieron de color negro comenzando a extenderse por su rostro. Al alejarse el humano había tomado la forma de un demonio completo. Hijikata puso unos ojos juguetones y repasó al demonio con su mirada.

-Impresionante... tan joven y ya puedes tomar el poder de un demonio completo... aunque demasiado inexperto como para usarlo. Me quedaré contigo.

Antes de que el demonio pudiese moverse la espada de Hijikata atravesó su pecho y comenzó a absorber la energía vil de su cuerpo. El muchacho quedó inconsciente en el suelo. Cuando hijikata se agachó a examinar el cuerpo el diablillo se abalanzó sobre el a sus espaldas.

-¡No toques al amo! ¡Ah...!
Antes de que completase la frase salió despedido contra la pared al otro lado de la sala.

Junto al quemado diablillo que ya no parecía moverse una silueta abandonó las sombras. Encapuchada y con dos dagas plateadas en sus manos se dirigió al humano.

   -El humano ahora me pertenece. -Dijo en un tono neutral Hijikata
   -¿Te pertenece? -La voz femenina al otro lado de la capucha soltó una risa-
   -Bueno, me parece que tiene una fisiología interesante. -Dijo el brujo en un tono juguetón
   -Mientras que muera me vale.
   -¿Un viejo amigo?
   -No exactamente. Temas personales.
   -Si tienen información sobre el muchacho me interesan... -Contestó Hijikata
   -No tengo asuntos contigo, brujo.
Hijikata esbozó una sonrisa mientras miraba fijamente a la asesina.
   -Mientras el humano muera es todo tuyo.
   -Me parece bien, pero solo te perdonaré vuestra historia a cambio de... tu nombre.
   -E.R. -Dijo secamente la mujer.
   -Hasta otra "E.R." recordaré esas siglas...
La silueta de la mujer volvió a envolverse en la oscuridad sin decir una palabra mas

Mas tarde, en una habitación oscura, repleta de estanterías llenas de frascos, potingues, manuscritos... en el centro de esta se hallaba el elfo diseccionando el cuerpo del joven humano que había traído desde la torre.

   -¿Que secretos ocultarás? -Decía en un tono algo alegre -Ya sé...
El brujo alzó sus manos en un tono violáceo. AL instante un diablillo surgió de entre las llamas verdes generadas espontáneamente.
   -¡Tu! ¡Golpeaste a Ratzag! -Chilló el diablillo.
   -Sí. Lo hice. Ahí tienes un cofre de oro. -Señaló el brujo
   -¡Nuevo amo!
   -Pero antes... ¿Me contarías quién era este humano? Digamos que es un trato.
   -Si... ¡A Ratzag gusta tu trato!
   -Bien. Pues comienza a contar.

Tras una larga noche de risas e historias contadas por el diablillo que Hijikata escuchó en silencio decidió dejar de lago el cuerpo del humano y extender un gran mapa en el lugar donde estaba este.

   -¿Dices que ese lugar estaba aquí? -Preguntó con un tono de curiosidad el brujo mientras le brillaban los ojos
   -¡Sí! ¡Ratzag no miente a su amo!
   -Bien... ¿Y como decías que se llamaba ese lugar?
   -El amo lo llamaba... ¡Nightspire! ¡Sí!

Hijikata fijó su vista en un punto del mapa donde se encontraba una pequeña isla la cual el diablillo le señalaba. Mientras observaba el punto en el mapa y continuaba escuchando al diablillo, emitía una sensación... de emoción.

Editado Julio 9, 2016 por Maplete

Salmissra · Julio 13, 2016

Antes de nada, quiero aclarar que esta pj ya tenía una ficha de rol, pero como no me gustaba el rol y apenas la usé, he decidido cambiar su historia, su descripción y todo sobre ella. Este será su nuevo rol.

Nombre: Lissandre Nymeris, apodada "la Víbora de la Arena" o "la Señora Serpiente"

Edad: 800 años

Profesión: Princesa Mercenaria del clan de las Serpientes de las Dunas.

Breve descripción física: Lissandre es una mujer alta (1'73m), de complexión atlética. Debido a su práctica de tirar con el arco no tiene el pecho demasiado desarrollado, manteniendo una talla normal para una Sin'dorei. Sin embargo, su cintura estrecha y sus voluptuosas caderas remedian esa lacra. Tiene la piel bronceada y tostada y el pelo de color castaño con algunos reflejos dorados. Sus ojos tienen una expresión pícara y forma felina, y como ni ella ni sus padres vivieron nunca en Quel'thalas, la corrupción de los cristales viles no le ha afectado, y mantiene un sano color miel en vez de el verde vil brillante de los ojos de los Sin'dorei. También tiene la nariz respingona y fina, y los labios carnosos.

Breve historia del personaje: Lissandre es hija de una pareja de mercenarios elfos de sangre nativos de Uldum. Su familia se mantuvo asentada en el desierto desde que un antepasado suyo fuese secuestrado por el clan de mercenarios conocido como las Serpientes de las Dunas. Con el paso de las generaciones la familia fue integrada y comenzaron a vivir como mercenarios. En el desierto de Uldum la sociedad se conforma de distinta manera. Los que viven allí son nómadas, y subsisten del saqueo y el pillaje, de manera que con el paso del tiempo se ha formado una sociedad basada en los grupos mercenarios. Cada uno de ellos está dominado por un Príncipe Mercenario al que eligen los miembros del clan, y pueden dejar de seguirlo cuando quieran, pues son un pueblo libre. Y todos los grupos están subyugados al conocido como "Rey de los Ladrones", cuya identidad y nombre real son desconocidos. En estos grupos mercenarios subsiste la ley del más fuerte, y no se discrimina por género o edad, sólo por fuerza. Debido a esto no existen roles de género, y el más débil de la pareja (sea hombre o mujer) se dedicará a servir al otro. Tampoco está mal vista la violación, pues se considera una demostración de fuerza, y para casarte con alguien primero debes raptarlo y llevarlo a tu tienda. Del secuestrador se espera fuerza y velocidad, y del secuestrado, que se resista hasta llegar a la tienda, y que una vez allí, acepte la unión. De este modo, una mujer como Lissandre pronto se labró una fuerte reputación. Ella es deslenguada, bebedora, amante de la fiesta y del combate, además de una mujer atractiva y peligrosa, lo que la hizo una figura muy popular, y la gente comenzó a apodarla "la Víbora de la Arena", ya que siempre se rodea de serpientes que tiene como mascotas, y usa su veneno para embadurnar sus armas.
El clan iba aumentando su poder, y se había convertido en el grupo mercenario más poderoso del desierto, lo que despertaba celos en los clanes rivales. Entonces llegó el día. El clan atacó un poblado pequeño para saquearlo y secuestrar a sus mujeres y niños, pero una vez allí les tendieron una emboscada. Gran parte del clan fue masacrado, incluido el Príncipe Mercenario que era uno de los amantes de Lissandre. La chica, sin embargo, sí consiguió escapar, y los restantes miembros del clan la proclamaron su líder, Princesa Mercenaria.
Aceptó su nuevo puesto con orgullo y guió al clan a una cueva oculta del desierto, donde se refugiaron. Después de dejarlos a salvo y poner como segundo al mando a un hombre de confianza, Lissandre se marchó en busca de grupos criminales de todo Azeroth que se uniesen a su clan, para evitar que un Príncipe Mercenario con un clan mayor intentase dominarlos y absorberlos en el suyo.
Actualmente, la mujer sigue de viaje por todo Azeroth, haciendo paradas en zonas donde considera que puede conseguir apoyo. Siempre va con una armadura ligera de cuero y mallas que deja al descubierto su vientre y sus muslos, o con lujosos vestidos de seda fina y de colores vistosos, pero nunca la verás desarmada, aunque parezca que lo está, siempre oculta armas. Normalmente lleva un arco y un carcaj a la espalda, dagas ocultas en los muslos, y un látigo colgando de su cintura.
Lissandre es una mujer extrovertida, traviesa, burlona y descarada, que no dudará en seducir como lo haría un hombre, beber cerveza en tu taberna en grandes cantidades y luego pagar con el oro que te ha robado de la caja sin que te enteres. Aparte de venderse como mercenaria y ladrona, es costumbre entre las mujeres del desierto vender su cuerpo, pues no lo ven como una deshonra, por lo que lo hará si es necesario.
Además, es fácil saber que es extranjera no sólo por sus costumbres, las cuales llevan a un choque cultural bastante a menudo, sino también por su marcado acento de Uldum.

tiriri · Julio 14, 2016

Nombre: Natla Tharenis

Edad: 23

Descripcion Física: Elfa de cabellos rubios, joven, ojos verdes (viles), unos labios rosados, y algo interesada por la alquimia.

Breve parte de su historia:

Historia del personaje: Natla Tharenis fue una elfa de sangre criada en el seno de una familia noble. Tuvo todas las comodidades y enseñanzas que conlleva esta posición. Tenía talento para el aprendizaje y comenzó a estudiar alquimia a la temprana edad de 9 años. Pero claro, no todo fue un mundo de rosas para la pequeña.

A la edad de 13 años sufrió un cambio que la marcaría durante el resto de su vida. En un mausoleo perteneciente a la familia Tharenis, sus padres decidieron prepararle una sorpresa. Era un lugar oscuro y frío, Natla se encontraba en una especie de altar rodeada por sus padres y sus tres hermanos, al fondo de la habitación un señor que no había visto antes que vestía unos ropajes oscuros y tapaba su rostro.

-Ma-Mamá, ¿Que vais a ha-hacer? -Dijo con una voz temblorosa

La familia permaneció en silencio. Sus hermanos la agarraron y amarraron al altar mientras Natla intentaba resistirse, antes de que se diera cuenta, sus padres recitaban una especie de conjuro. Con sus ojos llenos de lágrimas escuchó una voz muy grave en su cabeza.

-Te ayudaré, a cambio de tu alma. -Dijo la voz, a lo que la pequeña, cegada por el miedo asintió.

Repentinamente, a los pies de la chica una figura de un tono violáceo surgió de entre unas fugaces llamas, antes de que nadie pudiese hacer nada empujó a los tres hermanos violentamente contra las paredes del lugar, los boquiabiertos padres de la joven no parecían creerse lo que sucedía, se quedaron congelados por el miedo cuando el demonio acabó con sus vidas.

-Ahora el pago. -Dijo con su tono de voz tan grave que su eco resonó por un largo tiempo.

Antes de que la figura demoníaca cogiese a la joven, este se desvaneció en el mismo fuego del que provino. El hombre que se encontraba al fondo de la habitación en un principio, se acercó a Natla extendiéndole la mano para ayudarla a levantarse.

-Me llamo Hijikata Alcarin. Acompáñame. -Dijo el hombre

-¡¿Po-por qué?! -Chilló Natla aún asustada mirando los cuerpos de su familia

-Bueno.. -Los ojos del brujo la miraban con la curiosidad propia de un niño- Tienes talento para haber invocado a un demonio, me gustaría ver un desarrollo... mas completo de tu persona.

Levantó a la pequeña y cogiéndola de la mano la llevó a la mansión de este, después de dirigirla por numerosos pasillos llegó a una especie de biblioteca enorme con una gran mesa en su centro.

-Aquí tienes todo lo que quieras estudiar. Te estaré observando -Dijo Hijikata con una voz juguetona

-¿Y-y mi familia?

-Ahora soy yo, y estos libros.

El brujo cerró la puerta sin decir mas palabra y dejó a la pequeña en aquel lugar llevándole comida y lo que ella le pidiese cada día. Tras acostumbrarse un poco comenzó a leer algunos libros que llamaron su atención, con el tiempo leyó y leyó hasta aprender, con la ayuda de Hijikata, a realizar un ritual de invocación, incluso a dejar fluir la energía demoníaca por su cuerpo sin perder el control. Se convirtió en la dueña de la casa pues el brujo siempre estaba de viaje, traía artefactos y tras examinarlos los dejaba a Natla para que diese su opinión, tras 10 años Hijikata le permitió salir de la torre y le permitió acompañarle en un viaje a una misteriosa isla sobre la que acabab de enterarse.

Adjunto una foto de como seria mas o menos:

(Gracias a la ayuda de Maplete)

Editado Julio 14, 2016 por tiriri

Maplete · Julio 14, 2016

Ahora, tiriri dijo:

Nombre: Natla Tharenis

Edad: 23

Breve descripción física:

Historia del personaje: Natla Tharenis fue una elfa de sangre criada en el seno de una familia noble. Tuvo todas las comodidades y enseñanzas que conlleva esta posición. Tenía talento para el aprendizaje y comenzó a estudiar alquimia a la temprana edad de 9 años. Pero claro, no todo fue un mundo de rosas para la pequeña.

A la edad de 13 años sufrió un cambio que la marcaría durante el resto de su vida. En un mausoleo perteneciente a la familia Tharenis, sus padres decidieron prepararle una sorpresa. Era un lugar oscuro y frío, Natla se encontraba en una especie de altar rodeada por sus padres y sus tres hermanos, al fondo de la habitación un señor que no había visto antes que vestía unos ropajes oscuros y tapaba su rostro.

-Ma-Mamá, ¿Que vais a ha-hacer? -Dijo con una voz temblorosa

La familia permaneció en silencio. Sus hermanos la agarraron y amarraron al altar mientras Natla intentaba resistirse, antes de que se diera cuenta, sus padres recitaban una especie de conjuro. Con sus ojos llenos de lágrimas escuchó una voz muy grave en su cabeza.

-Te ayudaré, a cambio de tu alma. -Dijo la voz, a lo que la pequeña, cegada por el miedo asintió.

Repentinamente, a los pies de la chica una figura de un tono violáceo surgió de entre unas fugaces llamas, antes de que nadie pudiese hacer nada empujó a los tres hermanos violentamente contra las paredes del lugar, los boquiabiertos padres de la joven no parecían creerse lo que sucedía, se quedaron congelados por el miedo cuando el demonio acabó con sus vidas.

-Ahora el pago. -Dijo con su tono de voz tan grave que su eco resonó por un largo tiempo.

Antes de que la figura demoníaca cogiese a la joven, este se desvaneció en el mismo fuego del que provino. El hombre que se encontraba al fondo de la habitación en un principio, se acercó a Natla extendiéndole la mano para ayudarla a levantarse.

-Me llamo Hijikata Alcarin. Acompáñame. -Dijo el hombre

-¡¿Po-por qué?! -Chilló Natla aún asustada mirando los cuerpos de su familia

-Bueno.. -Los ojos del brujo la miraban con la curiosidad propia de un niño- Tienes talento para haber invocado a un demonio, me gustaría ver un desarrollo... mas completo de tu persona.

Levantó a la pequeña y cogiéndola de la mano la llevó a la mansión de este, después de dirigirla por numerosos pasillos llegó a una especie de biblioteca enorme con una gran mesa en su centro.

-Aquí tienes todo lo que quieras estudiar. Te estaré observando -Dijo Hijikata con una voz juguetona

-¿Y-y mi familia?

-Ahora soy yo, y estos libros.

El brujo cerró la puerta sin decir mas palabra y dejó a la pequeña en aquel lugar llevándole comida y lo que ella le pidiese cada día. Tras acostumbrarse un poco comenzó a leer algunos libros que llamaron su atención, con el tiempo leyó y leyó hasta aprender, con la ayuda de Hijikata, a realizar un ritual de invocación, incluso a dejar fluir la energía demoníaca por su cuerpo sin perder el control. Se convirtió en la dueña de la casa pues el brujo siempre estaba de viaje, traía artefactos y tras examinarlos los dejaba a Natla para que diese su opinión, tras 10 años Hijikata le permitió salir de la torre y le permitió acompañarle en un viaje a una misteriosa isla sobre la que acabab de enterarse.

(Gracias a la ayuda de Maplete)

Comento porque Tiriri me lo ha pedido, es que le da vergüenza a la pobre.

Maplete · Julio 17, 2016

(Nueva historia de Irvim Latharion)

Nombre: Irvim Latharion

Edad: 84

Profesión: Paladín de los caballeros de sangre

Breve descripción física: Mide 1'84, cabellos largos y rubios, de piel bastante clara y con una pequeña perilla. Suele vestir trajes oscuros cuando no una de sus armaduras.

Historia del personaje:

Irvim se encontraba sentado en la mesa de una taberna, se encontraba callado y algo serio mirando su jarra de vino mientras sus compañeros festejaban, brindabas y bebían a su salud.

   -¡Hey Irvim! ¿Te pasa algo? -Dijo uno de sus amigos
   -¿Eh? -Irvim tornó una sonrisa -No, no pasa nada...
   -Estas algo raro, ¡Es una fiesta en tu honor Irvim! ¡Te has casado!
El resto de compañeros al escuchar esto último volvieron a brindar y continuaron bebiendo.

El paladín se quedó mirando su jarra, recordando toda su vida hasta el momento. Nació en una familia adinerada, su padre era un paladín actualmente de la orden de caballeros de sangre bajo el mando de Lady Liadrin. Su madre no poseía poder alguno pero siempre fué muy estudiosa y fué la que educó a Irvim en lo que se podría llamar la vida diaria. Le enseñó matemáticas, ética, geografía... siempre fué todo un ejemplo a seguir para él. Su padre en cambio siempre estuvo muy ocupado sirviendo en la orden pero le educó bien en el arte de la espada y la luz a su hijo.

Durante su juventud siempre estuvo rodeado de amigos, actualmente hermanos de armas. Entrenaba con ellos, comía con ellos y paseaba por la isla de Quel'Danas ganando los recuerdos inolvidables para el, pero, la mejor etapa de su vida la pasó con su madre. Estudiaba con ella durante noches enteras, algunas mas pesadas que otras, pero aún atesora aquellos momentos, cuando aprendía algo nuevo y su madre le felicitaba, cuando lo regañaba por olvidar algunas lecciones o intentaba escabullirse con alguna tonta excusa. Cada vez que lo recuerda siempre se le escapa alguna lágrima...

   -Mama, ¿Tu crees que algún día seré como papá? -Decía Irvim con los ojos perdidos en el infinito
Su madre, Eleana Latharion, lo miraba siempre que hacía esa pregunta con una sonrisa y asentía.
   -Estoy segura de ello. Al fin y al cabo has salido a tu padre.
   -¿De verdad?
   -Claro.
A Irvim siempre le encantaba mirar la sonrisa de Eleana, cálida y pura, siempre transmitía una sensación de tranquilidad.
   -Pero aún te queda mucho por aprender, ¿Qué tal si ahora te centras y estudias un poco mas?
   -¡De acuerdo!
   -Es importante entrenar, pero también debes aprender lo básico sobre el mundo que te rodea.
   -Si, ya lo sé
   -¡Pues no te quedes mas tiempo mirando al techo y aprendete la lección!
   -Vaaale.

Cuando su padre estaba en casa siempre lograba escapar de esas tediosas noches de estudio y aprendía lecciones con su padre. Su madre siempre sabía donde estaba pero no iba a quitarle esos felices y únicos momentos de padre e hijo que ambos tenían. Se quedaba sentada cosiendo junto a la ventana mirando como entrenaban mientras tarareaba una canción...

"Cuando el invierno llega... y los pajaros se esconden en sus nidos... cuando las hojas han abandonado las cálidas ramas de los árboles... yo, te daré mi calor... cuando sientas soledad... cuando sientas dolor... cuando sientas miedo o creas caer... seré las alas que te mantendrán sobre la desesperación... Seré la luz que guíe tu camino. Cuando olvides quién eres... cuando no sepas lo que debes hacer... seré la voz, el susurro, que disipará tus dudas. Si tu vista se nubla, mis rayos alcanzarán tus ojos... Seré tu fiel compañero... tu reflejo en el espejo, un lejano recuerdo... hasta que vuelva el sol... hasta que oigas a los pajaros cantar... hasta que veas tu precioso jardín florecer... siempre estaré a tu lado..."

Irvim creció aprendiendo a pensar, a razonar cada situación desde un punto de vista justo, su madre le enseñó que la guerra y el castigo solo nublaba la razón... Aún cuando consiguió el mismo poder que su padre, nunca sintió la mas mínima tentación de usarlo fuera de las prácticas. Siempre intentaba ayudar a sus amigos cuando estos se peleaban, comenzó a caminar con una sonrisa, siempre firme y decidido actuó bajo sus propios principios. Hasta que Arthas llegó a Quel'Danas...

Irvim Latharion luchó codo con codo junto a sus amigos, siguiendo a su padre. Ayudó a evacuar a cuantos pudo, incluyendo a su madre, cuando el barco donde su madre zarpó se alejó solo un poco de la costa, los no-muertos surgieron de las profundidades... acabaron con todos en el barco, y el, junto a su padre, miraron impotentes desde la costa sin haber esperado tal peligro. Los soldados del barco no fueron los suficientes para detener a los necrófagos... Tras recuperar los cadáveres del navío, preparándose para quemarlos con la intención de que no se transformaran en aquellas aberraciones por la peste traída por Arthas, fué Irvim quién, con la cabeza firme cogió la primera antorcha y prendió fuego a la pila de madera donde se encontraba el cuerpo de su madre. Donde se despidió derramando solo unas pocas lágrimas y en silencio de Eleana.

Aún cuando ingresó en la orden de Lady Liadrin junto a su padre, los caballeros de sangre, se mantuvo firme a lo que le enseñó la persona a la que tanto respetaba. No se dejó llevar por la ira, ni tampoco se sumió en la tristeza, decidió proteger a sus compañeros, con una sonrisa como la de Eleana, con la que pudiese calmar los corazones de quién estuviese en apuros. Recordó la canción que su madre siempre le decía.

Cuando logró ascender en las filas de la orden de los caballeros de sangre y se le asignaron hombres bajo su cargo. Nunca le vieron titubear al levantar su espada. Siempre caminaba firme, con una sonrisa pura e inocente, y con unos ojos firmes y decididos en combate, donde nunca retrocedió una vez desenvainaba su espada.

El día que su padre le presentó a su prometida, un matrimonio concertado por la familia de esta, no se negó y aceptó la propuesta. Lo cuál le llevó a donde se encuentra ahora.

   -¿Irvim? ¿Estas ahí? -Repitío por décima vez su amigo en la mesa de aquella taberna.
Irvim le miró desconcertado
   -¡Claro que estoy aquí!
   -Parecías algo triste...
   -¡No, que va! Solo estaba haciendo memoria de ciertas cosas...
   -Ja ja ja, ¡Bueno, sonríe, que no queremos ver caras largas esta noche!
   -¡Tenlo por seguro!

Irvim alzó su jarra con una sonrisa en su rostro, y brindó junto a sus compañeros en aquella alegre noche, donde, al día siguiente marcharía a su nuevo hogar junto a su esposa.

Editado Julio 17, 2016 por Maplete

Ticaty · Julio 19, 2016

Bueno he decidido crearme una cuenta para aventurarme a esto del RoL que siempre he querido hacerlo y aquí os presento a Ghlamy . Espero que la ayudéis a descubrir el mundo....y me ayudeis a mi a Rolearla que soy "noob" en esto.

Nombre: Ghlamy Goldmen apodada “Buuh”

Edad: Indefinida ( Ghlamy jamas contestaría a esta pregunta sin ofenderse)

Profesión: Eso que es ? . Ghlamy jamas a necesitado trabajar , ni tener una profesión con la cual ganarse la vida , gracias a la buena posición social que a tenido su familia en Lunargenta.

Breve descripción física: De aspecto refinado, andares altivos y personalidad justa, Ghlamy es una elfa que no pasa desapercibida gracias a su belleza , cosa de la que ella esta encantada y no duda es decirlo siempre que tiene ocasión Cabellos rubios y piel fina, jamas sonríe, se limita a mirar con altivez a cualquier elfo (nunca a tratado con otras razas , mas que el contacto visual de las que se hospedaban en la posada ) que decide mantener algún tipo de conversación con ella.

Breve historia del personaje: Ghlamy nació en una buena familia, sus padres dueños de alguna de las posadas mas famosas y caras de Lunargenta habían intentado educar a su hija con valores tales como la sencillez, el respeto y la amabilidad seguramente porque ellos llegaron a su buena posición gracias al duro trabajo. Lamentablemente Ghlamy no se parecía a ellos en nada, altiva , egoísta y caprichosa siempre tenia que salirse con la suya. Ocupaba su día comprando, en la peluquería y dándose grandes paseos por la ciudad para que -según ella- todos puedan admirar su belleza.

Apodada Buuh desde pequeña ( pues todo la asustaba ) Ghlamy JAMAS a salido de Lunargenta y desconoce por completo los conflictos en los que anda asumido Azeroth actualmente, pues para ella el único conflicto del que debia preocuparse era poder comprarse esa toga de seda de araña rosa que acababa de traer el mercader.

HASTA HOY. Sus padres hartos de su conducta, han decidido que para que pueda ser consciente de la suerte que tiene, a de salir de la ciudad y ganarse la vida como ellos hicieron. Sin dinero, con solo una muda de ropa y sin piedra del hogar Ghlamy tiene por delante la tarea de buscar su propio futuro y la orden de no volver a casa hasta que el mapa mágico que su padre le facilito este completamente descubierto.

Ella con lagrimas en los ojos, frente al Orbe de traslación, ni se imagina la aventura que tiene por delante, las miles de historias por vivir que la cambiaran por completo y los GRANDES amigos que encontrara y a los que podrá llamar familia en un futuro.

Editado Julio 19, 2016 por Ticaty

Kaelthorz · Julio 21, 2016

Aquí va el comienzo de mi personaje, iré creando ya en otro post la historia mas extensa.

Nombre:

Valthador Albasangre

Edad:

44 años(Muy joven)

Profesión:
Paladín Orden de los caballeros de sangre, Aprendiz de herrero (conocimiento básico)

Descripción física:

Lo principal que llama la atención de Valthador,es su rostro, son unos tatuajes rúnicos en el ojo izquierdo muy llamativos y otros que están por su cuello, también posee un gran físico, de complexión atlética, sobre todo cabe resaltar es veloz y debido a su experiencia en combate cuenta con algunas cicatrices en el cuerpo, aparté posee el cabello relativamente largo de color dorado y mide 1.83 cm.

Descripción psicológica:
Valthador tiene dos versiones de si mismo, una que vive del pasado de los recuerdos de su anterior vida, lo atormentan por momentos y otra que vive el hoy con su venganza y busca llevar protección y justicia que antes no pudo lograr y así evitar otro desastre, como en la tercera guerra, perder seres cercanos a el. Lo único común en ambas es que tienen el mismo nivel de búsqueda de justicia y su vital propósito de ser así es para proteger a todos, Valthador puede ser inexpresivo, el dolor de perder a su familia le afecta, y teme entrelazarse sentimentalmente con cualquier, pero el disfruta mucho de la compañía y el respalde de compañeros a la hora de estar en alguna misión, prefiere calidad que cantidad, es muy serio cuando se trata de alguna misión o deber ya que está muy centrado y proteger a todos cuesta lo que cueste.

Historia:

a medida de que avance mi personaje, iré publicando historias de su pasado y actuales de el.

Mi vida siempre se mantuvo en los territorios de los elfos. Mi familia estaba ligado a la guardia real, defensores orgullosos de la sociedad Quel’dorie, y a la iglesia de la luz. Mi padre fue un guardia en sus tiempos de gloria muy habilidoso con la espada y una voluntad inquebrantable, hasta que un incidente, que hasta ahora no supieron aclararnos, le arrebato la vida, fue un duro golpe para nuestra familia que con el tiempo supimos sobrellevarlo. Y así pase gran parte de mi vida. Mi madre y mi hermana bendecidas y pertenecieron a la iglesia de la luz hasta su ultimo días de vida, mi hermana siempre fue la “mención honorifica” de la familia al seguir el camino de la luz con gran habilidad, y respecto a mí, solo me quedo seguir el camino de mi padre y unirme a la guardia real, en mi instrucción en la guardia real me vi inmerso en el conocimiento de la herrería, minería y por supuesto en el fino arte del combate. Pero nada de eso me garantizaba sobrevivir a lo que estaba por tocar las puertas de Lunargenta en los años que vendrían, el día que perdí todo.

Comenzó la tercera guerra y con ello una parte de mi murió, solo para que alguien más fuerte naciera, comenzó el ataque de Arthas y su camino hasta nuestra fuente del sol, nos derrotaron y el costo fue enorme, perdí a mi madre y a mi hermana, solo ruego que encuentren la paz como lo hizo mi padre y no cayeran en las filas de la plaga, desde ese momento en nuestro pueblo nació un nuevo sentimiento, un nuevo renacer y es allí donde Valthador Albasangre nace, mi pasado, mi familia y mi nombre quedo borrado junto a lo que antes éramos y desde ese momento un nuevo camino se abrió para mí.

Fue duro al comienzo, sin nuestra fuente de magia, sin nuestros seres queridos, solo nos quedó confiar en nuestro príncipe y en su viaje hacia nuevas tierras para buscar solución a toda una raza, no solo yo perdí algo, si no todos, y eso creo un cambio cultural en toda nuestra raza.

Peleamos contra plaga, contra los amani, contra nosotros mismos pero no caímos, solo nos volvimos más fuertes, debido a mi experiencia en la guardia real, el combate estuvo allí a mi lado siempre, hasta que llego la oportunidad de formarme. La orden de los caballeros de sangre y me uní a ellos, siendo aún iniciado, la orden me mando a un pueblo distante, con un maestro que pueda instruirme correctamente, a pesar de mis aventuras del pasado, la que comenzara ahora es la más importante de mi vida.

una carta que deberé abrir secretamente cuando llegue allí y a solas, es mi misión principal y todo comienza ahora. Actualmente ando alistando todo para salir para aquel pueblo, no tengo mucha información solo unos nombres para orientarme y una carta que deberé abrir secretamente cuando llegue allí y a solas, es mi misión principal y todo comienza ahora.

Editado Julio 21, 2016 por Kaelthorz

Mannoloroth · Julio 22, 2016

Nombre: Bharan, cuando se hospeda da el nombre de Zarpa Cinérea

Descripción: Es un monje errante pandaren. Muy serio y callado, patillas pobladas, pelo negro y ojos color ámbar rodeados de dos manchas negras. El sombrero suele taparle la cara, siempre lleva una hierba en la boca.

Edad: No se conoce, pero por su voz es un joven adulto.

Profesión: Cuentacuentos.

Historia(me he basado en el Presagistas: Gul'Dan subido hace poco):

—Nadie ha oido hablar nunca de mi clan.

En la costa este de cima Kun-Lai había un pueblo, grande pero aislado del resto, en una isla aparte, los abruptos acantilados entorpecian el comercio hasta el punto de que nadie iba allí, a Niebla Solar. Estaba regida por dos familias, los Zarpa Cinérea, seguidores de la filosofía huojin y los Garra Celestial, seguidores de la filosofia tushui.

Bharan, el hijo menor de los Zarpa Cinérea, había nacido con una marca de nacimiento extraña en la espalda, todos decían que era un sha. Sus padres murieron pronto y los Garra Celestial asesinaron a sus hermanos asegurandose asi el gobierno del clan de los Niebla Solar. Bharan cayó en depresión, la gente lo rechazaba, los sacerdotes y chamanes del templo le rehuian y le llamaban monstruo, se habia enamorado de la hija de los Garra Celestial, Gina. Quien le rechazo y tiro piedras, era apaleado e insultado a diario. A menudo, se acercaban niños a él cuando dormía en la calle y le tiraban un cubo de agua.

—Bharan, espalda de shaaa... Bharan, el monstruo detráaas...

Una y otra vez se repetía esto. Los Garra Celestial decidieron coger un día mientras dormia, darle una paliza con piedras y palos, echarlo fuera de la ciudad, y cerrar otra vez la puerta. Bharan tuvo que robar una balsa, y poner rumba a la isla mas cercana. Allí perdido en el mar sintió susurros, venían de abajo, una criatura que nunca había visto, era una naga, parecía muy herida, sangraba. Lo miro a los ojos y el supo que le estaba leyendo la mente, la naga dijo:

—Cómete mi corazón.

Bharan asintio, metio la mano en el pecho muerto de la naga y sacó el corazón aun palpitante... No quería hacerlo, pero se moría de hambre, mientras masticaba, la carne seguía hacciendo contracciones... Cayó inconsciente.

Hoy es un día de celebración, Gina Garra Celestial celebraba su boda al mediodía, la única hora de sol que había debido a la altura de las murallas, la entrada se habia bloqueado como era costumbre. Todo el pueblo se hayaba reunido en la zona central de la plaza, sin excepcion, la carpa era de barriles de cerveza colgados por cuerdas. Al terminar la ceremonia los barriles se dieron la vuelta empapando en alcohol a todo el clan. En ese momento, sentado sobre un poste, Bharan sonrió y tiró una cerilla...

—Nadie ha oído hablar nunca de mi clan, y nadie lo hará.

Ubangui · Julio 23, 2016

Nombre:

Deroin

Raza:

Humano/Renegado

Edad:

24 (desde hace años)

Profesión:

Formaba parte de la milicia a distancia y explorador de Villa Darrow./ Actualmente viaja escribiendo sus memorias de cuando estaba vivo para no perder la cordura.

Descripción Física:

No mas de 1'75 de altura debido a la forma de su espalda, pelo largo y medio caído de color negro rancio. Se nota que en su vida era esbelto y fuerte pero ahora los huesos se dejan entre ver entre lo que le queda de carne.

Descripción Psicológica(creo que para rolear este personaje es importante):

Aunque parezca a primera vista que es serio y muy introvertido en realidad lo que le sucede es que no se acostumbrado aún a su nuevo yo. Tiene pequeños claros mentales de cuando estaba vivo y algunos de cuando servía al Rey Exánime lo que hace que se confunda y no sepa distinguir en ocasiones cuando ocurrió "que".

Historia Resumida:

Vivió en Villa Darrow con su familia hasta que el padre murió en la segunda guerra y él ocupó su puesto como explorador. Al comienzo de la tercera guerra volvió desde el sur de los reinos del Este para intentar evacuar a su familia pero antes de llegar a su hogar murió envenenado. Tiene recuerdos de entrar en casa de su madre y mirar como una horda de muertos la devoran y como sus hermanas se esconden mientras miran desde un hueco reconociendo la abominación que es ahora su hermano. Despertó con plena conciencia en Campo Santo con un libro con las hojas en blanco, solo la primera hoja está escrita con unas manchas(parecen sangre seca) que reza así:

"Escribo estas líneas para recordar lo que he sido y lo que hice, no intento justificarme ni vivir en un pasado que ya no existe. Solo quiero no cordura antes de que deje de ser yo y vuelva a ser una marioneta del Lich, Ojala pudiera"...

Decidme si queréis que suba la historia larga y los progresos que vaya haciendo con el pj

Mannoloroth · Julio 23, 2016

hace 9 horas, Ubangui dijo:

Nombre:

Deroin

Raza:

Humano/Renegado

Edad:

24 (desde hace años)

Profesión:

Formaba parte de la milicia a distancia y explorador de Villa Darrow./ Actualmente viaja escribiendo sus memorias de cuando estaba vivo para no perder la cordura.

Descripción Física:

No mas de 1'75 de altura debido a la forma de su espalda, pelo largo y medio caído de color negro rancio. Se nota que en su vida era esbelto y fuerte pero ahora los huesos se dejan entre ver entre lo que le queda de carne.

Descripción Psicológica(creo que para rolear este personaje es importante):

Aunque parezca a primera vista que es serio y muy introvertido en realidad lo que le sucede es que no se acostumbrado aún a su nuevo yo. Tiene pequeños claros mentales de cuando estaba vivo y algunos de cuando servía al Rey Exánime lo que hace que se confunda y no sepa distinguir en ocasiones cuando ocurrió "que".

Historia Resumida:

Vivió en Villa Darrow con su familia hasta que el padre murió en la segunda guerra y él ocupó su puesto como explorador. Al comienzo de la tercera guerra volvió desde el sur de los reinos del Este para intentar evacuar a su familia pero antes de llegar a su hogar murió envenenado. Tiene recuerdos de entrar en casa de su madre y mirar como una horda de muertos la devoran y como sus hermanas se esconden mientras miran desde un hueco reconociendo la abominación que es ahora su hermano. Despertó con plena conciencia en Campo Santo con un libro con las hojas en blanco, solo la primera hoja está escrita con unas manchas(parecen sangre seca) que reza así:

"Escribo estas líneas para recordar lo que he sido y lo que hice, no intento justificarme ni vivir en un pasado que ya no existe. Solo quiero no cordura antes de que deje de ser yo y vuelva a ser una marioneta del Lich, Ojala pudiera"...

Decidme si queréis que suba la historia larga y los progresos que vaya haciendo con el pj

Esto siempre se confunde, (tu personaje pudo ir a tirisfal) Pero los nomuertos jugables no murieron por la plaga (puedes rolear uno. Por supuesto) pero estos humanos seguramente son muertos de tiempos anteriores ¿Que por que? Por que estan enterrados, si hubiese sido la Plaga estarias dando vueltas por ahi hasta que una val'kyr te de la colleja

Ubangui · Julio 23, 2016

hace 36 minutos, Mannoloroth dijo:

Esto siempre se confunde, (tu personaje pudo ir a tirisfal) Pero los nomuertos jugables no murieron por la plaga (puedes rolear uno. Por supuesto) pero estos humanos seguramente son muertos de tiempos anteriores ¿Que por que? Por que estan enterrados, si hubiese sido la Plaga estarias dando vueltas por ahi hasta que una val'kyr te de la colleja

Mi no-muerto no murió por la plaga, murió envenenado y sin saber porque fue enterrado en campo santo. Donde allí le resucitaron, por eso su motivación es saber que ocurrió para acabar allí y que le pasaría a su familia. Siento el malentendido, en la historia extensa te lo va contando.

Gracias por el apunte.

StarrkIV · Julio 24, 2016

Nombre: Desconocido, le gusta que lo llamen wolfkrieg

Edad: Desconocida se le aproximan entra 20 y 28

Profesión: Entusiasta de la cerveza, aspirante a maestro de la cerveza.

Descripción: Es un huargen de 2 metros de altura transformado con un peso de 130kg pelaje gris, ojos verdes. De humano 1.75 metros de altura con 75kg de peso cabello, castaño ojos azules, veloz y ágil. Tanto su personalidad huargen como la humana están en constante conflicto sin embargo en la actualidad ambas tienen una tregua por un bien mayor.

Historia: Era un cazador antiguamente antes de que los gilneanos tuviera que abandonar gilneas, luego sin haber ganado el control sobre su maldición y en constante conflicto con esta abandono todo y comenzó a viajar errante mente en busca de la paz interna entre la maldición y el humano. Las constantes peleas contra si mismo estaba haciendo mella en su salud física y mental hasta que un día en una taberna la cual ya no recuerda donde estaba(de la borrachera con la que salio) descubrió que tanto al humano como al huargen les apasionaba, El alcohol. Desde entonces en una silenciosa tregua con ambas personalidades se a dedicado a viajar por todos los mundos en buscas de las mejores bebidas, las de mas renombre, las mas fuertes, las mas suaves, las mas dulces y las que queman, probando todas y compartiendo sus las aventuras que ha vivido de taberna en taberna, desde el tragapenas hasta la taberna del fin del mundo. De vez en cuando se le puede ver luchando valientemente abanderando su causa cuando el deber lo llama con alguna de los compañeros conseguidos en sus viajes mientras que otras lo puedes ver vomitando en medio del campo de batalla... En fin, la próxima vez que entres a una taberna no te sorprendas si lo encuentras en unas de las mesas, acércate a el tal vez tenga una buena historia para ti o cargue alguna bebida exótica para invitarte, pero tampoco te le acerques mucho porque puede ser que ya llevo mucho tiempo ahí ese día y termines teniendo que ir a limpiar tu armadura. Con Wolfkrieg nunca se sabe que sucederá, solo se sabe que sea lo que sea que pase te vas a acordar de el.

Mannoloroth · Julio 25, 2016

hace 18 horas, StarrkIV dijo:

Nombre: Desconocido, le gusta que lo llamen wolfkrieg

Edad: Desconocida se le aproximan entra 20 y 28

Profesión: Entusiasta de la cerveza, aspirante a maestro de la cerveza.

Descripción: Es un huargen de 2 metros de altura transformado con un peso de 130kg pelaje gris, ojos verdes. De humano 1.75 metros de altura con 75kg de peso cabello, castaño ojos azules, veloz y ágil. Tanto su personalidad huargen como la humana están en constante conflicto sin embargo en la actualidad ambas tienen una tregua por un bien mayor.

Historia: Era un cazador antiguamente antes de que los gilneanos tuviera que abandonar gilneas, luego sin haber ganado el control sobre su maldición y en constante conflicto con esta abandono todo y comenzó a viajar errante mente en busca de la paz interna entre la maldición y el humano. Las constantes peleas contra si mismo estaba haciendo mella en su salud física y mental hasta que un día en una taberna la cual ya no recuerda donde estaba(de la borrachera con la que salio) descubrió que tanto al humano como al huargen les apasionaba, El alcohol. Desde entonces en una silenciosa tregua con ambas personalidades se a dedicado a viajar por todos los mundos en buscas de las mejores bebidas, las de mas renombre, las mas fuertes, las mas suaves, las mas dulces y las que queman, probando todas y compartiendo sus las aventuras que ha vivido de taberna en taberna, desde el tragapenas hasta la taberna del fin del mundo. De vez en cuando se le puede ver luchando valientemente abanderando su causa cuando el deber lo llama con alguna de los compañeros conseguidos en sus viajes mientras que otras lo puedes ver vomitando en medio del campo de batalla... En fin, la próxima vez que entres a una taberna no te sorprendas si lo encuentras en unas de las mesas, acércate a el tal vez tenga una buena historia para ti o cargue alguna bebida exótica para invitarte, pero tampoco te le acerques mucho porque puede ser que ya llevo mucho tiempo ahí ese día y termines teniendo que ir a limpiar tu armadura. Con Wolfkrieg nunca se sabe que sucederá, solo se sabe que sea lo que sea que pase te vas a acordar de el.

Es interesante un huargen no enfadado con los nomuertos. Muy original

RafaMonclova · Julio 26, 2016

-Nombre: Alodî

-Edad: Se dice que unos 8000 años

-Profesión: Mago de guerra

-Breve descripción física: Es un elfo de pelo anaranjado y largo, alto y de complexión delgada. Su aspecto siempre ha sido muy sereno, sin dejarse llevar por sus sentimientos, sino por el bienestar de los suyos y la protección de estos. Dicen que a pesar de su delgadez, es extremadamente poderoso con el uso de las diversas escuelas de magia.

-Breve historia del personaje: Alodî fue un elfo adoptado por los magister elfos de sangre, durante una ofensiva contra la plaga. Su aspecto débil les hizo pensar que estaría gravemente enfermo y con posibilidades de vida escasas. Sin embargo, tras usar un poco de magia en el vieron que le afectó muy positivamente, y que poseia un caracter y avidez por la magia muy fuertes, por lo que decidieron llamarle Alodî, en honor al primer Guardian de Tirisfal. Con los años, Alodî fue dominando el poder de la magia que le enseñaron los magister, hasta tal punto de ser un mago muy poderoso, el cual dominaba sobre todo la magia de fuego. Los magister, al ver su gran potencial, decidieron hacerle mago de guerra, ya que él solo queria proteger a su gente de la plaga, y actualmente es un miembro muy importante entre los magos elfos de sangre en Dalaran, encabezando diversas expediciones y ofensivas como en Ulduar y la Isla del Trueno.

konsito · Julio 28, 2016

1.Nombre: Susseth BrisaSolar

2.Edad: 2.100 Años

3. Profesión: Enfermera, aunque es Sacerdotisa de la Luz, Usa sus poderes para curar.

4.Breve descripción física: Elfa de la Sangre. Altura 1.70. Rostro canela con ligeros tonos rojos, cabellos lisos color platino. Labios color carmín y sonrisa cálida.

5.Breve descripción del personaje: Nacida en Quel´thalas. Cuando nació fue protegida por sus padres, Nobles seguidores de la Luz y muy queridos. Su madre se llamaba Ilessia era una Sacerdotisa muy venerada en Quel´thalas fue muy respetada. Su padre Relen, Paladín que protegió a su familia a capa y espada. Ambos fallecieron en la guerra, tratando de proteger a su hija de la que un Clérigo alto, dijo que tenia altos poderes de Sanación. Illesia antes de morir le encargo a su hermana Agatha, proteger a su hija Susseth. Agatha huyo con la pequeña a Lunargenta aunque ella prefirió elegir una casa más alejada. Cuando Susseth tenia poca edad presencio como la plaga entro a la casa de su tía y fue atacada, mientras Susseth se escondía su tía la protegió con todas sus fuerzas antes de caer exhausta al suelo y ser atravesada por la espada de un esqueleto de la plaga. Mientras la pequeña presencio como su tía murió, un poder despertó de su interior, y antes de que la plaga pudiera alcanzarla surgió un escudo que la protegió, y gracias a esos poderes pudo escapar. Al escapar fue a para a un templo al que sacerdotes y clérigos aceptaron como aprendiz. Susseth aprendió mucho sobre sus poderes y a la edad de 1.800 años se fue del Templo para llevar una vida de conocimiento, ella quería ir por templos y abadías para leer y adquirir más poderes de la Luz. Llego muy lejos, a tierras donde la plaga dominaba casi todo. Un día en un templo en el que estaba estudiando, presencio como la plaga entraba por las puertas y masacraba a la gente, ante tales sucesos Susseth ya sabia como protegerse, estaba viviendo la situación que vivió cuando era pequeña. Se dispuso a luchar, pero antes de hacer nada vio como una niña pequeña lloraba, así que la protegió antes de que la plaga pudiera acercarse a ella. La salvo y la llevo con sus abuelos, que prometieron cuidarla mientras sus padres eran enterrados. La niña se quedo sorprendida de como la salvo Susseth, y prometió que seria Sacerdotisa como ella, para salvar a la gente. Después de un año, Susseth adquirió el titulo de enfermera, no para curar pero que mientras curaba ellos sufrieran, ella prefería curarles con su magia sanadora, de la que tanto hablaba la gente. Fue de pueblo en pueblo curando y le gustaba mucho curar a la gente, aunque sentía la necesidad de encontrar un hogar y gente que la quisiera. Su sueño era proteger a todo ser vivo, y que nadie sufriera mientras ella estuviera viva. A día de hoy lucha contra la Oscuridad y sana a sus pacientes, en la batalla, y en sus casas.

Mannoloroth · Julio 29, 2016

Este personaje ya existia, pero decidi cambiar la historia debido a metarol extremo

Nombre: Siglud Alator

Edad: 24

Profesión:Comandante de la Alianza con una tropa poco numerosa de soldados y una ciudadela en Draenor.

Descripción física: Estatura media, pelo castaño recogido en una coleta, barba poblada, ojos azules con unas ojeras leves.

Historia: Siglud Alator era granjero, hijo de una granjera de Páramos de Pomiente y un soldado de Ventormenta. Su madre le enseño a trabajar la tierra, su padre le enseñó thalassiano (lengua de los elfos nobles/de sangre) y a utilizar la espada.

Cuando Siglud solo tenía diez años, su madre lo escondio en un compartimento secreto del sótano. Allí estuvo escondido todo el día, por la noche salió para ver lo que quedaba de su padre y su madre... Siglud recogió sus pertenencias y se dirigió a Ventormenta, donde la matrona del orfanato decidió mandarlo con los otros tantos huérfanos de su edad, a la Catedral, a hacerse sacerdotes, sin embargo, Siglud solo quería matar a los orcos, los había visto por la rendija de un tablon de madera. El ansía por derrotar a aquellas criaturas indignas de la Luz convirtió a Siglud en un paladín de renombre, ascendió rápidamente en el ejército.

Su ascenso a Comandante se lo ganó cuando tenía la orden de destruir un campamento renegado en Los Humedales, los superaban en numero, los humanos y enanos eran 20 y los renegados 50, aun que no había ningun barril de añublo. Demostró sus dotes como estratega, atrayendo a los renegados a una grieta con aberturas a los lados, en las aberturas a los lados se apostó un soldado, de manera que los renegados no llegaban a darse cuenta quien los mataba hasta que morian.

Actualmente Siglud está donde esté la acción, desde el ataque de Alamuerte hasta la Horda de Hierro, ahi está él y su escuadrón.

Editado Julio 29, 2016 por Mannoloroth

Yakuzados · Agosto 3, 2016

1.Nombre: Kaltorei.

2.Edad: 19 años.

3.Profesión: Pirata.

4.Breve descripción física: Rubio, ojos azules, pelo largo, fuerte y muy ágil.

5.Breve historia del personaje: Una vez un pirata llamado Kulratir dejó tal impacto en la imaginación popular que su época fue conocida como la Edad de Oro de la Piratería. Su nombre real era Kul'tar y nació en la lejana Isla de Quel'Danas, algunos relatos proclaman que llegó a tener 14 mujeres, pero tampoco hay documentación que lo pruebe, su reinado de terror duró apenas dos años, su ultima esposa llamada Liara la cual dejó con un bebé y los abandonó. De ahí surgió Kaltorei, abandonado por su madre también, huérfano en tiempos de guerra, escapó con 8 años hasta Bahía de Botin donde fue entrenado a la marinería, aprendió a vivir sin nadie a su lado hasta los 19 años donde ejerció como pirata para conseguir su objetivo: ser el pirata más conocido de Azeroth.

Mannoloroth · Agosto 6, 2016

Nombre: Halruk Ojorrojo
Edad: Unos 60(nuestros 45-50)
Descripción física: Es un orco enorme, mas alto de la media, una larga barba gris le cae de la capucha desde la que resaltan dos ojos rojos. Siempre va con túnica y capa oscuras. Al verlo, pensarás "¿Por que ese orco no porta un hacha ni una armadura de placas, si no una daga y unas ropas oscuras? Un orco de ese tamaño podria levantar a un tauren del suelo..."
Historia: Halduk nació poco antes de la Primera Guerra. En su pequeño clan, durante el año de su nacimiento todos los niños nacieron con los ojos azules, una buena señal, ese niño tendría una vida feliz y gloria en batalla. Pero Halduk nació con el color amarillo común. La gente lo trataba como al pobre "Ojoamarillo" y aun cuando se convirtio en un orco enorme imbatible entre su clan, un heroe guerrero de la Horda, su clan lo seguia tratando como en Nagrand, pero ahora residiendo en Trabalomas, ocultos bajo la sombra de las montañas de Alterac, no muy cerca de la aldea Lobo Gélido.
Viajó a Orgrimmar, fundada hace dos años, allí se internó en las oscuras cavernas del Circo de las Sombras, donde estuvo paseando, pensando, y en vez de serenarse, se enfadó más con su clan. Él quería ser respetado, temido, no el pobre "Ojoamarillo". Sabía que el clan podía mostrarle más respeto, un respeto que no le ofrecían y por eso los odiaba. Pero...
—¿Quién... soy?—Se preguntaba el orco.
—Yo se lo que deberías ser, Halruk.— fué la voz una súcubo enjaulada en su cabeza. Halruk miró a los lados y vio a la súcubo en su jaula, parecía sonreirle. —Puedes ser fuego, puedes ser PODER—El demonio le envió imágenes mentales: Primero se vio a si mismo, aunque no se veía los ojos, con ropas oscuras entrando en su aldea. Después vio como la gente parecía asustarse al verlo, y por último vio al orco sobre una pequeña montaña de cadáveres (su clan era minúsculo) y con fuego vil en las manos. Halruk aprendió el arte de la brujería. Tres años después se presentó en su aldea, y cumplió la visión, mató a los pocos habitantes de su aldea, los que no estaban ahí estaban trabajando para la Horda. Curiosamente, faltaban los nacidos en el mismo año que él, los llamados por el título de Ojoazul, Halruk quemó los edificios. Solo dejó runas viles marcadas en la Piedra del Chamán de su aldea.
" Ojorrojo va a por los Ojoazules". Desde entonces, el enorme orco da caza a los miembros restantes de su clan...

Editado Agosto 6, 2016 por Mannoloroth

tiriri · Agosto 10, 2016

Nombre: Darestra Autumnfeather

Edad: 19

Profesión: Señora menor de la familia Automnfeather, cuarta heredera del nombre familiar.

Aspecto: Darestra es una joven elfa que mediría cerca de 1'70, con unos cabellos blancos que caen sobre sus hombros. Posee una piel de color claro, cercano al pálido y unos brillantes ojos verdes que parecen observarte fijamente. Un rostro angular bastante valorado dentro de los canones de belleza elficos.

Historia: Darestra nació en el seno de una de las mas poderosas familias nobles de la isla de Quel'danas, con gran representación en el gobierno, su familia siempre estuvo en la toma de las decisiones mas importantes de la isla. Cuando surgió el ataque a la isla de Quel'danas por parte del rey exánime, ella junto a sus tres hermanos mayores se retiraron y ahora participan fervientemente por la completa reconstrucción de la isla.

Los autumnfeather siempre se han caracterizado por ser una familia ambiciosa que ha logrado mantener su poder, a veces de forma justa pues han podido permitírselo y otras que... algunos tachan de poco honestas. Tras la muerte de la cabeza de familia nombró heredero al tercer hermano mayor de los tres varones, como segunda heredera a su hija, Darestra pues había demostrado ser popular y bien reconocida por el resto de familias.

Tras su muerte, en completo desacuerdo tanto el primero como segundo hermano se aliaron para asesinar, envenenado, al tercer hermano el día del funeral. Algo que lograron conseguir, acusando a Darestra de dicho acto alegando que tras su dulce rostro y su actitud inocente yacía la codicia de los Automnfeather. El resto de familias de Quel'danas tornaron velozmente en desprecio contra la pequeña, en aquel momento de catorce años de edad, lo cuál obligó a la chica escapar de la isla para no sufrir el destino de su hermano, ayudada por fieles hombres a su padre.

Tras llegar a Lunargenta y vivir de incógnito el primer año, el segundo hermano, en una de sus visitas a la capital logró reconocerla y estar a punto de asesinarla. Desde ese momento su palabra no tuvo mucho valor... la mayoría de sus hombres la traicionaron pues estaban hartos de vivir en el anonimato y sus creencias morales fueron llevadas por la codicia.

Tras escapar de Lunargenta y vagar en solitario de una localidad a otra llegó a un pequeño pueblo montañoso y nevado de las montañas trabalomas donde conoció a un elfo llamado Artorium, un mercenario que residía allí temporalmente mientras esperaba un encargo. A pesar de haber llegado allí, varios de los espías de su hermano mayor, y el actual cabeza de familia lograron encontrarla y enviar una pequeña escuadra de hombres, atacando violentamente una taberna donde ella se encontraba. Cuando la tiraron de la mesa, un extraño huevo, una reliquia perteneciente a los Automnfeather cayó de su bolso llegó a parar a los pies del mercenario, el cual, ebrio recogió el huevo y observo como los hombres intentaban asesinar a la jovencita.

Tras dejar su jarra pateó al primero de sus guardias y logró acabar con la mitad en pocos segundos usando solo su espada hasta que se batieron en retirada. Tras esta demostración de su manejo de la espada, Darestra contrató sus servicios y le pidió que la ayudara, difícilmente convenciéndolo hasta que logró sus servicios tras hablarle de su familia, la cuál interesó a Artorium y acordó que le encontraría un lugar seguro mientras el se encontraría de viaje en una extraña isla llamada Brightwall, a la cuál llevaría cuando viese que sería seguro.

Tras partir mantuvieron el contacto a través de mensajeros de confianza con los que el mercenario contaba desde un principio. Darestra busca el derecho a retomar su lugar como la cabeza de familia, el cuál le corresponde por derecho y de momento solo dispone de un hombre de confianza, el cuál accedió a protegerla fervientemente hasta que esta adquiriese su objetivo y el su riqueza.

Gracias a la ayuda de Maplete

Maplete · Agosto 10, 2016

Que bonita historia, me suena a una que tengo escrita en un bloc de notas de mi ordenador... que cosas eh jajaja

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